Barcelona, 22 de septiembre. En un reciente análisis sobre el panorama político catalán, el conseller de la Presidencia de la Generalitat, Albert Dalmau, ha señalado que el crecimiento de Aliança Catalana puede entenderse como una reacción a la profunda decepción generada por el proceso independentista y el resurgimiento de movimientos de extrema derecha a nivel global.

Dalmau, en declaraciones a Rac1 que fueron recopiladas por Europa Press, expresó que tras promesas que incluían "helado de postre todos los días" y soluciones mágicas como las de 'Magia Borras', la realidad ha conducido a una gran frustración. "No debería sorprendernos que algunas personas opten por un independentismo radical", reflexionó el político.

El conseller criticó que en la última década, diversos partidos han llevado a los catalanes a encaminarse hacia posiciones extremas, alejándose del centrismo. En este contexto, mencionó a Aliança Catalana y Vox, haciendo hincapié en que estas formaciones parecen alinearse con las posturas de Donald Trump, a quien acusó de perjudicar la economía local a través de su política de aranceles.

Dalmau abogó por el diálogo y el entendimiento con estas corrientes políticas, cuestionando sus posturas en temas vitales como el aumento del salario mínimo, la semana laboral de 37 horas y media, y los derechos relacionados con el aborto y el matrimonio entre personas del mismo sexo. "Es fundamental conocer sus opiniones sobre estas cuestiones", comentó.

Finalmente, Dalmau destacó que, aunque las encuestas muestran un ascenso de partidos como Aliança Catalana, también indican que tanto el Govern como el PSC cuentan con una alta valoración en la gestión de problemas críticos como la vivienda, la seguridad y el desarrollo económico. Resaltó que ya se están observando resultados positivos, como una reducción del 10% en ocupaciones ilegales y una disminución del 13% en robos con fuerza, lo cual, según él, debe ser comunicado de manera clara a la ciudadanía.