Supondría "restricciones" en determinados usos del agua pero no en el de boca
BARCELONA, 3 Ago.
El directivo de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), Samuel Reyes, ha estimado que se podría declarar la alarma por sequía en el área metropolitana de Barcelona "en la época o finales de septiembre" si no llovizna, en un instante en que los embalses de las cuencas internas catalanas están al 42%.
En afirmaciones a Catalunya Ràdio agarradas por Europa Press, ha asegurado que si se va a llegar a esta situación, por la carencia de lluvias y la inclinación a la baja en los embalses, supondría unas "restricciones" en determinados usos del agua en el área metropolitana de Barcelona pero que no afectaría al agua de boca.
Reyes ha remarcado que estas restricciones serían, por ejemplo, el riego de jardines un par de veces por semana, no poder adecentar la calle con mangueras, una dotación máxima día tras día por habitante de 250 litros --se gasta frecuentemente entre 115 y 130-- y reducciones en la agricultura, la ganadería y también instalaciones como campos de empleo.
El directivo de la ACA ha considerado que, si fuera precisa declarar la alarma en el área de Barcelona, los ciudadanos "no lo apreciarán en el grifo" en el mes de septiembre u octubre, y dijo que sin las desalinizadoras el porcentaje de los embalses estaría 3 o 4 puntos porcentuales abajo.
Reyes aseguró que el agua es un recurso con limite, ha letrado por un óptimo empleo y ha señalado que se tienen que prosperar hábitos para acrecentar la eficacia en la vivienda.
Ha explicado que la situación de hoy de sequía es muy afín a la que se vivió en 2018, pero que no es tan "crítica" como la que hubo en 2007 y 2008, en el momento en que los embalses estaban bajo el 20% --en este momento se ubican en el 42%--.
Reyes dijo que hoy en dia hay treinta ayuntamientos catalanes con limitaciones de agua, y ha garantizado el abastecimiento en ayuntamientos conectados a redes supramunicipales por "bastantes meses".