BARCELONA, 23 Jul.

La C-33 registró un incremento del 118% del volumen de automóviles desde la apertura del peaje de Mollet del Vallès (Barcelona), que sucedió el 1 de septiembre de 2021, hasta marzo de 2022.

Así se desprende de una pregunta de Cs en el Boletín Oficial del Parlament de Catalunya (Bopc) obtenida por Europa Press que señala los datos de la Conselleria de Interior desde el objetivo de los peajes en esa vía, que coincidió con el alzamiento de barreras en la C-32 norte y la AP-7 y la AP-2.

En preciso, de septiembre de 2021 a marzo de 2022, el volumen de automóviles que pasaron por la carretera C-33 alcanzó los 21.034.231, en frente de los 9.646.296 automóviles registrados desde septiembre de 2020 a marzo de 2021.

Por meses, en el primer mes del año de 2022 se registró el aumento interanual mucho más alto, con un 162% mucho más, seguido de febrero (158%) y de noviembre de 2021 (155%) en relación a un año antes.

En cambio, el mes de septiembre de 2021, el primero sin peajes, fue el que registro el aumento mucho más bajo, con un 72% mucho más, seguido de octubre, con un 95% mucho más, con en comparación con mismo mes del año previo.

Los peajes de la AP-7, la AP-2, la C-32 norte y la C-33 dejaron de marchar la medianoche del 1 de septiembre de 2021, tras el objetivo de la concesión a las compañías Invicat y Acesa, las dos del conjunto Abertis.

El Govern adjudicó a fines de agosto de 2021 el cuidado y administración de las autopistas C-32 y C-33 desde el 1 de septiembre y hasta marzo de 2022 a una unión temporal de compañías formada por Sorigué, Comsa y también Innovia Coptalia por un valor de 6,99 millones de euros, a los que se sumaron otros 1,47 millones en término de impuestos, hasta 8,4 millones.

En su instante, el Govern anunció una inversión de 7,5 millones de euros para la supresión de las 38 playas de peaje que había en la C-32 norte y el peaje troncal de Mollet del Vallès (Barcelona) en la C-33.