Parte de la crisis entre Pujol y Roca hasta las secuelas de la salida de Junts del Govern

BARCELONA, 5 Feb.

La periodista Núria Orriols ha repasado en el libro 'Convergència. Metamorfosis o extinción' (Angle Editorial, 2022) el paseo histórico del espacio político convergente, comenzando por la CDC dirigida por el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, su mutación al independentismo y su posterior fragmentación.

En una entrevista a Europa Press, explicó que se propuso el libro desde tres cuestiones: cuándo se genera la mutación independentista del partido, las causas que llevaron a su disolución y las causas de su "dispersión y radicalización del alegato".

El libro fué fruto de un trabajo de un par de años de investigación y unas 60 entrevistas a los personajes principales de la narración de este espacio político --solo 2 no desearon charlar--, tal como un desarrollo de búsqueda de datos y contraste de información.

El punto de inicio de esta crónica política es la construcción del liderazgo político de Jordi Pujol y el choque que protagonizó con Miquel Roca, en una Convergència que rigió a lo largo de 23 años en Catalunya y que asimismo tuvo un papel clave en la política estatal.

Según Orriols, la pugna con Roca, de la que Pujol salió vencedor, fortalecerá su liderazgo en CDC y enseña en parte "el principio del fin de una forma de llevar a cabo política y el comienzo de otra, mucho más monolítica" en el partido que entonces lideraba.

En su opinión, las situaciones de corrupción que asediaron al partido --caso Palau, 3%-- y la confesión del expresidente en 2014 de que tenía dinero en el extranjero llevaron a la disolución de Convergència, y no la mutación al independentismo.

"Piensan que la composición no puede subsistir si no la matan. ¿Qué es ser convergente? Lo había llenado de contenido Jordi Pujol. Cuando confiesa, representa que se quedan sin identidad, y esto sumado a una composición que piensan que no van a poder asumir tras la situacion Palau y el del 3%, deciden realizar un corte, como un banco malo, para tener una composición novedosa", enseña la autora.

El libro asimismo profundiza en la operación que, bajo el nombre de 'Operació Canonges' y desarrollada por David Madí, llevó a Artur Mas a la presidencia de la Generalitat, y la predominación que tuvo la llegada de novedosas generaciones que deseaban ofrecer un salto adelante en el eje nacionalista en relación a la práctica incorporada por Pujol.

Una vez Mas logra gobernar, los que auspiciaron su ascenso --el llamado 'pinyol'-- comenzaron a competir para poder ver quién podía tener mucho más aptitud de predominación en sus resoluciones, lo que se tradujo más tarde en la capacitación de corrientes y familias que van a tener su peso más adelante, ciertas cuales aún persisten en Junts.

Para Orriols, Artur Mas es alguien que, más allá de presentarse como racional y que no puede ser amigo de la gente sobre las que toma resoluciones, no prescindió de su gente de seguridad, como David Madí: "Y indudablemente el hecho de no estimar prescindir de la mayor parte de la multitud que le ha acompañado en su camino es lo que enseña que hiciese la refundación del PDeCAT así como la logró, y no de otra forma".

"Y indudablemente asimismo enseña que, en el final, en el momento en que debe elegir entre PDeCAT y Junts, se quede en el PDeCAT, a pesar de que no tenga muchas opciones de tener representación política", añade la periodista, que afirma que varios de los políticos con los que mencionó se arrepienten de la desaparición de CDC.

Sobre la mutación independentista de CDC, ten en cuenta que en 2012 Mas debió enfrentar desde la presidencia de la Generalitat una época de recortes "con una intensa contestación popular en la calle" y lidió asimismo con una mayoría absoluta del PP en Madrid, partido con el que había pactado los Presupuestos en Catalunya.

Después de que el Gobierno de Mariano Rajoy rechazara la iniciativa de Mas de un pacto fiscal para Catalunya, Orriols comprueba que Convergència, por vez primera en su crónica, abrazó en 2012 el 'Estado propio', al unísono que en Catalunya apareció la ANC, entidad que ven "que tiene la posibilidad de tener paseo, y desde aquí piensan que es la vía para procurar recobrar el timón del orden y poner el contador de la legislatura a cero".

"La maquinaria de Palau ve la apuesta soberanista como una forma de mudar el centro de gravedad de la legislatura, que hasta el día de hoy ha pivotado cerca de los cambios presupuestarios y las manifestaciones sociales", destaca en el libro, donde asimismo informa de que la transformación ideológica del partido es consecuencia de la presión ejercida por las novedosas generaciones.

En un capítulo, Orriols precisa que la primera oportunidad que Mas verbaliza la iniciativa de cerrar CDC es en una comida a lo largo del verano de 2015, un concepto que de entrada no comparte con la dirección de partido, y no va a ser hasta julio de 2016, con Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, en el momento en que se festejará el congreso fundacional del PDeCAT y se va a dar 'carpetazo' a Convergència.

"Indudablemente el PDeCAT es mucho más extremista de lo que desearía Mas, pues abraza la unilateralidad y sus postulados van alén de CDC, pero la dirección del PDeCAT es considerablemente más moderada que Carles Puigdemont", resalta la periodista, lo que cree que hace un distanciamiento que explicaría su intención, mucho más adelante, de hacer Junts.

En Junts, apunta que uno de sus primordiales inconvenientes es "la pugna continua entre familias para poder ver quién tiene el timón", y en otro nivel cree asimismo que se procuró recortar con todo cuanto representaba Pujol.

Sin embargo, apunta que han aparecido nuevos líderes en Junts, como los exconsellers Jaume Giró y Victòria Alsina, que comienzan a reivindicar la figura del expresidente catalán "tras el ostracismo que él y el partido le habían impuesto", y que la restauración de Xavier Trias como alcaldable por Barcelona es asimismo un síntoma de esto.

Sobre Puigdemont, considera su figura esencial en la resolución de Junts de escapar del Govern de Pere Aragonès, "y todos y cada uno de los concurrentes que aguardaban regresar a controlar el partido con Jordi Turull, y pensaban que lo estaban logrando tras Argelès-sur-Mer y L'Hospitalet, fueron de victoria en victoria hasta la derrota final".

"Hay parte del partido que es imposible desvincular de lo que piensa Puigdemont. A partir de aquí, se abre una pugna que aún no entendemos el desenlace de la historia" pues, a su juicio, los que votaron por quedarse en el Ejecutivo catalán procurarán supervisar la capacitación, más que nada dependiendo del futuro judicial de la presidenta del Parlament en funcionalidades, Laura Borràs.

La duda, mira Orriols, es si los que defendían quedarse en el Govern alcanzan realizar un partido afín a eso que había sido CDC con un Puigdemont que precisa Junts "como un aspecto de desestabilización por su situación".

"Es la clave para entender si hay una vuelta a eso que fue CDC o desaparece finalmente del ámbito", ha recalcado Orriols, que asimismo informa de que va a marcar el rumbo de Junts la viable vuelta o no de Puigdemont a Catalunya.

Orriols (Berga, 1992) es articulista de política en el Diari Ara desde 2015 y coopera de manera periódica en los programas 'El Suplement' de Catalunya Ràdio, 'Més 324' de TV3 y 'No ho sé' de Rac1, y en 2022 fué premiada con el premio de periodismo de investigación Ramon Barnils por su informe sobre las licencias por edad en el Parlament.