Interpretada por Eneko Sagardoy, Edurne Azkarate y también Itziar Ituño y proyectada a certamen en Sitges
SITGES (BARCELONA), 9 Oct.
El director alavés Paul Urkijo se basa en la mitología vasca en la película 'Irati', ambientada en el siglo VIII y donde surgen luchas de poder y tensiones entre el paganismo y el cristianismo: "En los símbolos de la mitología logramos hallar enseñanzas para la vida común y el día a día".
En rueda de prensa este domingo en el Sitges Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya, el directivo ha asegurado que la historia es muy local y arraigada, fundamentada en los cuentos de la mitología vasca: "Es local pero completamente exportable", ha subrayado.
En la película, proyectada en la sección oficial a competición, se relata la crónica de Eneko (Sagardoy), un joven noble y católico de los Pirineos, que se candidatea para ser señor del valle, y para esto va a deber hallar el cuerpo de su padre, fallecido en la guerra de Roncesvalles y que fué sepultado con rituales paganos, a eso que le va a ayudar Irati (Azkarate), misteriosa joven con la que se adentrará en el bosque donde "todo cuanto tiene nombre existe".
Urkijo aseguró que en la mitología vasca, quizá gracias a la orografía y el idioma, se ha perpetuado en los cuentos la simbología de la diosa matriarcal, y explicó que de una manera abstracta ha amado enseñar su forma de ver el planeta y buscar "perpetuar los nombres de la mitología vasca", tal como respaldar a otros pueblos a fin de que expliquen su cultura y también historia.
Ha destacado que las ubicaciones naturales, muchas de sitios populares en su niñez, son un personaje principal mucho más de la película y que se ha grabado con luz natural y las nocturnas con fuego real para dotar de "realismo y textura" la factura del largometraje.
"Con la luz natural se logra un expresionismo muy fuerte", ha incidido Urkijo, para quien ciertos planos tienen un punto tenebrista y de las pinturas negras de Francisco de Goya, y dijo que tuvo claro desde el principio que deseaba rodarla en otoño en el momento en que la naturaleza tiene un tono mortecino que muta hacia otra estación.
El directivo explicó que al euskera que se utiliza en la película ha amado ofrecerle "la soronidad del vasco viejo de la región del Pirineo", y ha remarcado que era lo razonable que esta película fuera íntegramente en euskera.
Itziar Ituño ha subrayado que para su personaje oír un euskera que no es el suyo "viste el personaje" y fue un reto interpretativo, y ha remarcado que la diosa Mari representa todo aquello en lo que creían hombres y mujeres en los comienzos de la historia.
El actor Eneko Sagardoy ha asegurado que para él fue pasmante sentirse "una parte de los cuentos, historias que han cubierto de una manera no tangible, por el boca a boca", y ha aplaudido la utilización del euskera como exhibe de respeto hacia la red social mucho más pequeña, más allá de llevar a cabo una película universal.
En exactamente la misma línea, Edurne Azkarate ha considerado que quedó un euskera muy homogéneo en la película intentando encontrar meditar como sería en esa época y que sea comprensible para los vascoparlantes.
Con 'Irati', el directivo alavés vuelve al Festival de Sitges, donde ahora presentó en 2017 'Errementari: el herrero del demonio' y en 2020 el cortos 'Ofrecer-ofrecer'.