Puigdemont advierte que un rechazo a la cuestión de confianza podría haber colapsado la legislatura.
Carles Puigdemont, presidente de Junts y exdirigente de la Generalitat de Cataluña, ha manifestado que la negativa de la Mesa del Congreso a tramitar la propuesta de Junts que busca forzar al presidente Pedro Sánchez a someterse a una cuestión de confianza podría tener como consecuencia el "colapso" de la legislatura actual.
Durante una reciente entrevista en TV3, Puigdemont expresó su inquietud tras la decisión mayoritaria del PSOE y Sumar en la Mesa del Congreso de no decidir aún acerca de la admisión a trámite de la proposición no de ley presentada por su partido. El líder independentista declaró que la postura adoptada por los socialistas fue una muestra de prudencia, aunque subrayó que este silencio esconde una necesidad inminente de tomar decisiones importantes.
Puigdemont sostuvo que los socialistas son conscientes de las implicaciones de haber desestimado su propuesta en este momento: "Si hubieran rechazado nuestra iniciativa, las repercusiones habrían sido irreversibles. Esto, indudablemente, podría haber llevado a la legislatura al colapso", afirmó con contundencia.
A su juicio, el Gobierno del PSOE ha optado por ganar un tiempo adicional, dado que el informe de los letrados del Congreso no impide que la cuestión de confianza sea admitida a trámite el 7 de enero. Reiteró que no existe ningún obstáculo técnico para que esto ocurra y subrayó la legitimidad de la propuesta de Junts de plantear esta cuestión de confianza, argumentando que el PSOE no ha cumplido con los acuerdos pactados durante la investidura de Sánchez hace más de un año.
En este contexto, Puigdemont alertó a los socialistas de que, si no se producen cambios notablemente positivos, no tendrá sentido que Junts continúe brindando su apoyo al Gobierno de Pedro Sánchez y Sumar. Además, demandó transformaciones drásticas y tangibles en la actuación del Gobierno.
Cuando fue preguntado sobre la posibilidad de que se produzcan estos cambios antes del 7 de enero, Puigdemont fue claro: en la actualidad, no existen motivos que justifiquen una renovada confianza de Junts en el PSOE.
El exdirigente también dejó en claro que Junts no está en posición de negociar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2025 debido a los incumplimientos por parte de los socialistas: "En este momento, no podemos ni siquiera pensar en negociar los Presupuestos", expresó con desdén.
Al ser interrogado sobre un posible escenario de elecciones generales anticipadas, Puigdemont no lo descartó, afirmando que es "una posibilidad real". Sin embargo, añadió que los socialistas han demostrado una notable capacidad de resistencia en el poder, sugiriendo que podrían gestionar toda una legislatura sin contar con un presupuesto aprobado.
En temas relacionados con la Ley de Amnistía, Puigdemont lamentó que la amnistía judicial no haya producido efectos visibles y que ni el PSOE ni el PSC hayan otorgado una "amnistía política". El exmandatario criticó que tanto el actual presidente de la Generalitat, Salvador Illa, como Pedro Sánchez no hayan establecido contacto con él y se mostró indignado por no contar con la protección adecuada que debería recibir como exjefe del Gobierno catalán: "Me tratan como si fuera un presunto criminal, igual que el Tribunal Supremo", declaró.
En cuanto a la negociación sobre las competencias de inmigración, Puigdemont afirmó que los avances se han estancado. Señaló que Junts ha solicitado al Gobierno la transferencia de todas las competencias delegadas en esta materia, lo cual implicaría la creación de una ley orgánica en el Congreso. Explicó que es fundamental que la Generalitat se responsabilice de la política migratoria en Cataluña, desde el control de fronteras hasta las decisiones sobre expulsiones o permisos de larga duración.
Categoría:
Newsletter
Entérate de las últimas noticias cómodamente desde tu mail.