El director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), Samuel Reyes, ha expresado su opinión de que la potabilización del agua en Barcelona no es comparable a la de otras zonas de Catalunya, y por lo tanto, cada uno debería pagar un precio distinto por este servicio.
En una entrevista con el diario 'El Periódico', Reyes explicó que los precios deberían variar debido a que en los Pirineos, el agua "sale de la fuente con una calidad que requiere menos tratamientos". Además, señala que la distribución del agua puede ser más económica en una gran ciudad en comparación con un pueblo con casas dispersas, ya que cada persona requeriría una mayor cantidad de tuberías. En cualquier caso, considera que es necesario establecer una cuota fija base y un primer tramo a un precio razonable.
Reyes también mencionó la fase de preemergencia por sequía que se anunciará la próxima semana en Catalunya, la cual, según él, actuará como un llamamiento a la ciudadanía. En relación a la posible restricción del consumo doméstico, afirmó que todavía están evaluando opciones y análisis de medidas anteriores, dificultades de cumplimiento y reacciones de las actividades económicas. En base a toda esta información, tomarán una decisión que se anunciará en los próximos días.
Ante la sequía, el director de ACA propone implementar el Plan Especial de Sequía y expandir las plantas potabilizadoras, estaciones de regeneración y nuevos pozos de agua. También mencionó los planes de ampliar la desalinizadora de la Tordera y construir una nueva planta en Foix. Sin embargo, destacó que traer agua potable en barcos sería considerada una opción de último recurso si la sequía persiste. En cuanto a la regeneración del agua, Reyes aseguró que se está avanzando hacia la potabilización sin verterla primero en los ríos.
Respecto al trasvase del Ebro, el director de ACA señaló que no se puede descartar completamente, aunque en este momento no está sobre la mesa. Considera que es mejor apostar por un área metropolitana de Barcelona autosuficiente en términos de abastecimiento de agua, y enfocar los esfuerzos en la potabilización del río Besòs y la construcción de nuevos pozos en el sistema Ter-Llobregat.