Después de más de tres meses desde las elecciones catalanas, los dos partidos independentistas más representativos de la comunidad autónoma, ERC y JxCat, han iniciado finalmente contactos para tratar de formar un nuevo Govern.

La dificultad de la negociación

La negociación no será fácil, ya que ambos partidos tienen diferentes visiones sobre cómo avanzar en el proceso independentista. JxCat defiende una línea más dura, mientras que ERC prefiere una vía más moderada. Además, el hecho de que ambos partidos hayan pactado previamente con unionistas en otras ocasiones dificulta la confianza.

Otro handicap que tendrán que superar es la situación de sus respectivos líderes, Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, quienes se encuentran exiliado y en prisión, respectivamente.

El calendario y los objetivos

Ambos partidos han acordado que la primera reunión será la semana que viene. El calendario será ajustado y la negociación no será fácil, pero el objetivo es claro: formar un nuevo Govern cuanto antes, intentando superar cuanto antes los desacuerdos entre las partes.

La prioridad para ambos partidos es conseguir una mayoría sólida en el Parlament que permita avanzar en el proceso independentista. Pero también deberán acordar cómo gestionar la situación económica y social de la comunidad autónoma, especialmente tras la pandemia del COVID-19.

Las posibles soluciones

Una de las soluciones posibles para facilitar la negociación podría ser la aceptación de la figura de un "president consensuado" entre ambas partes, lo que permitiría un liderazgo eficiente y beneficiaría el avance del proceso independentista.

Otra solución podría ser la creación de una mesa de diálogo entre partidos independentistas y partidos unionistas para tratar de desatascar la compleja situación política catalana, y eventualmente convocar elecciones para dar voz a la ciudadanía.

Las implicaciones para la política española

La formación de un nuevo Govern independentista tendría importantes consecuencias para la política española. El gobierno de Pedro Sánchez tendría que enfrentarse a una nueva realidad política en Cataluña, especialmente si se produce un nuevo intento de referéndum de independencia, lo que podría desencadenar una crisis política de grandes proporciones.

El papel de la sociedad catalana

Finalmente, cabe destacar el papel de la sociedad catalana en este proceso. La ciudadanía ha demostrado su gran capacidad de organización y movilización en el pasado, y sin duda será clave en el avance del proceso independentista en el futuro, ya sea a través de la presión en las calles o en las urnas.

• En conclusión
• ERC y JxCat han iniciado contactos para formar un nuevo Govern.
• Las diferencias entre ambos partidos complicarán la negociación, pero el objetivo es claro: formar un nuevo Govern cuanto antes.
• Las posibles soluciones incluyen un "president consensuado" o la creación de una mesa de diálogo entre partidos independentistas y unionistas.
• La formación de un nuevo Govern tendría importantes implicaciones en la política española, y la sociedad catalana será clave en el proceso.