BARCELONA, 28 de noviembre.
La Generalitat de Cataluña ha puesto en marcha de manera inmediata un plan excepcional de bioseguridad y control tras la aparición de dos casos de Peste Porcina Africana (PPA) en jabalíes hallados muertos en la provincia de Barcelona. Esta decisión ha llevado a la clausura total del acceso a espacios naturales en 12 municipios afectados.
En el área de influencia más cercana al foco detectado, que se extiende en un radio de 6 kilómetros, se han establecido severas restricciones que incluyen la suspensión total de actividades de caza, así como de trabajos forestales. Todas las actividades en esta zona rústica quedan prohibidas por cuestiones de bioseguridad. Además, se están implementando barreras físicas y químicas, y se han instalado trampas diseñadas para el control de la población de jabalíes.
Las autoridades han querido garantizar un enfoque coordinado ante esta situación, activando operativos conjuntos que involucran a la Conselleria de Agricultura, los Mossos d'Esquadra, el Seprona y expertos municipales. Entre los municipios incluidos en esta alerta se encuentran Sabadell, Sant Quirze del Vallès, Polinyà, y otros en la provincia de Barcelona, como Montcada i Reixac y Rubí.
En un perímetro de seguridad ampliado a 20 kilómetros, que engloba un total de 64 municipios, también se han impuesto restricciones específicas. Estas incluyen limitaciones en las actividades recreativas, de caza y aquellas relacionadas con la biodiversidad. Se ha prohibido el acceso al Parque de Collserola para actividades de ocio, con el fin de facilitar el control de la situación y garantizar la bioseguridad.
Ante esta adversa situación, el departamento de Agricultura ha convocado con urgencia una reunión con los alcaldes de los municipios en cuestión, representantes de la Diputación de Barcelona y los consejos comarcales, así como directivos del Parque de Collserola, con el objetivo de coordinar acciones y maximizar la eficacia del operativo implementado.
Adicionalmente, se ha emitido un conjunto de recomendaciones para los municipios del área afectada. Estas incluyen limpiar con mayor frecuencia papeleras y contenedores, colocar comederos para gatos en lugares elevados, y recordar a la población que está prohibido alimentar a los jabalíes. También se ha señalado que es urgente reportar la aparición de jabalíes muertos al número de emergencias 112, sin intentar manipular los cuerpos.
A pesar de que la Peste Porcina Africana no representa un peligro para la salud humana, supone una amenaza seria para la industria porcina. Por ello, se insta a la colaboración de los ciudadanos y gobiernos locales para hacer frente a esta emergencia y asegurar la efectividad de las medidas adoptadas.
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