En Barcelona, el alcalde Jaume Collboni ha celebrado el décimo aniversario del programa Làbora, destacándolo como un recurso esencial para fomentar oportunidades laborales entre los ciudadanos de la ciudad.

Durante la inauguración del evento anual, Collboni afirmó que es inaceptable que cualquier persona quede rezagada en el camino hacia el progreso communal. Acompañado por Esteve Ferrer, director de la Federació d'Empreses d'Inserció de Catalunya, hizo un llamado a la unidad y a la acción para asegurar un futuro más inclusivo.

El alcalde destacó los logros del programa, que ha logrado involucrar a 55.000 personas, y aplaudió la dedicación de las diferentes organizaciones y empresas colaboradoras. Collboni lo calificó como un modelo de colaboración público-social que ha demostrado ser un verdadero éxito en la construcción de una sociedad más equitativa.

“Son estas personas las que realmente dan valor a nuestro esfuerzo colectivo y a la inversión de recursos públicos”, afirmó, subrayando la importancia del empleo y del acceso a la vivienda como fundamentos para una vida digna en común.

Asimismo, el alcalde mencionó la reciente reestructuración del gobierno municipal, cuyo objetivo es equilibrar la prosperidad y la distribución de la riqueza, uniendo los Departamentos de Servicios Sociales y Promoción Económica bajo la dirección de Raquel Gil.

Esteve Ferrer, como representante de las organizaciones que impulsan el programa, enfatizó cómo Làbora facilita el acceso al mercado laboral para sus participantes, permitiéndoles convertirse en ciudadanos con plenos derechos.

El evento continuó con un panel de discusión donde participaron relevantes figuras del ámbito social, como Sonia Fuertes, comisionada de Acción Social, Desirée Garcia, de Càritas, y Albert Sales, del Institut Metròpoli, quienes compartieron sus perspectivas sobre el impacto del programa y su importancia para la integración social.