En un giro notable de los acontecimientos, el comisario jubilado José Manuel Villarejo se prepara para ofrecer su testimonio en la 'Operación Catalunya', un caso que ha captado la atención pública y que tendrá lugar en Andorra a las 15 horas. Villarejo ha anticipado que en su declaración abordará las presuntas irregularidades que observó durante su carrera policial, afirmando que su vida es "la más transparente del mundo".

Antes de su testimonio, Villarejo se dirigió a los periodistas, dejando claro que prefiere no adelantar detalles sobre su declaración ante la juez de la Sección de Instrucción Especializada número 2 de la Batllia de Andorra. Su prudencia se debe a experiencias pasadas que le han llevado a ser cauteloso en su trato con los medios.

El excomisario expresó su preocupación por la posibilidad de hablar con los reporteros antes de su aparición ante la jueza, recordando cómo su entrevista con el periodista Jordi Évole en 2017 podría haber contribuido a su encarcelamiento. "Imagínense lo que voy a declarar y las repercusiones que eso tendrá", reflexionó Villarejo.

Villarejo manifestó que no tiene remordimientos por su trayectoria y recordó que este lunes se conmemoraron ocho años desde que, según sus palabras, un "grupo de individuos nefastos" decidieron arruinar su vida. Su crítica se centró en un conjunto de fiscales que, según él, conspiraron en su contra, así como en un juez que fue desplazado tras recibir amenazas.

En un aparte más sombrío, el comisario jubilado reveló que ha recibido amenazas, aunque no quiso entrar en detalles sobre su origen: "Jamás pensé que se me permitiría venir aquí a declarar, y he sido objeto de muchas intimidaciones para que no hable".

Como parte de los testimonios del día, también comparecieron los exministros de Finanzas y Asuntos Exteriores de Andorra, Jordi Cinca y Gilbert Saboya, lo que añade más complejidad a esta trama judicial que ha mantenido en vilo a la opinión pública.