El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha destacado que la sequía es el mayor problema que actualmente enfrenta Catalunya, y ha advertido que esta situación desafortunada no será un suceso fortuito.

En una comparecencia luego de la reunión del Consell Executiu, afirmó: "Nos equivocaríamos si lo afrontamos como una excepción. Entendemos que serán más habituales y de más intensidad por el cambio climático".

El Govern, según Aragonès, tiene "la solución" con acciones inmediatas, de mediano y largo plazo para evitar mayores restricciones de agua.

Esto incluye el uso eficiente del agua; incrementar la capacidad de las desaladoras y potabilizadoras; y avanzar en el plan de gestión de cuencas internas y el plan de gestión de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) para adaptarse al cambio climático.