Barcelona, 4 de noviembre. En un evento notablemente significativo, el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, ha conmemorado este lunes el vigésimo quinto aniversario del programa 'Escoles + Sostenibles', una iniciativa municipal que se centra en promover la educación ambiental y los valores de sostenibilidad en los centros educativos de Barcelona.

El acto tuvo lugar en el emblemático Saló de Cent del Ayuntamiento y contó con la presencia de figuras relevantes, como Teresa Franquesa, fundadora del programa, así como docentes, exalumnos y alrededor de 250 estudiantes de entre 5 y 16 años que han estado involucrados en esta importante iniciativa.

Collboni destacó que este programa ha sido fundamental para fomentar una cultura de sostenibilidad en las escuelas y ha creado vínculos valiosos entre las instituciones educativas y las organizaciones de los barrios. Además, hizo hincapié en que, hace 25 años, la conversación sobre sostenibilidad en las aulas era prácticamente inexistente, reconociendo la valentía y la visión de aquellos que impulsaron este proyecto en sus inicios.

El alcalde también agradeció a los jóvenes su compromiso diario, resaltando que sus pequeños actos contribuyen a la preservación del planeta y a mejorar la calidad de vida en la ciudad. Según Collboni, la red educativa está posicionando a Barcelona como un modelo a seguir en la lucha contra el cambio climático.

Iniciado en el año 2000, el programa cuenta actualmente con la participación de aproximadamente 440 escuelas, que trabajan en proyectos relacionados con el cambio climático, la alimentación responsable, la biodiversidad y la eficiencia energética.

Para el curso 2025-2026, se han integrado 45 nuevos centros al Compromís Ciutadà per una Barcelona + Sostenible, mientras que otros 41 comenzarán o renovarán su compromiso trienal en el marco de esta iniciativa.

Teresa Franquesa, durante su intervención, subrayó que la esencia del programa radica en convertir las escuelas en espacios donde se pueda imaginar y construir un futuro mejor. “El programa surgió en un momento de cambio de siglo, cuando Barcelona aspiraba a ser más sostenible, y fue evidente que las escuelas debían ser parte de este movimiento,” agregó Franquesa.

Montserrat y Maria Antònia, dos profesoras que han sido parte del programa desde su creación, reflexionaron sobre las transformaciones experimentadas a lo largo de los años, coincidiendo en que su impacto ha sido benéfico no solo para las escuelas, sino también para las familias involucradas.

La exalumna Adriana Cervera compartió su experiencia, describiéndola como “muy enriquecedora”, señalando que esta iniciativa la ayudó a darse cuenta de que lo que se hacía en su colegio se replicaba en muchas otras instituciones. Por su parte, Quim Fernández, otro antiguo alumno, expresó su gratitud por haber formado parte del programa, ya que le permitió adquirir conocimientos de una manera “más práctica”, lo que influyó en su decisión de estudiar ciencias medioambientales en el futuro.