El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, destacó este sábado el rol crucial de las ciudades en la promoción de la paz, especialmente en tiempos en los que las naciones no logran encontrar puntos de encuentro. Durante su discurso en el evento titulado 'Guerra y Paz en el siglo XXI. El futuro de Medio Oriente', celebrado en el Palau de Pedralbes, Collboni recordó que se conmemoran tres décadas desde el inicio del Proceso de Barcelona, que marcó un hito en la cooperación entre naciones del Mediterráneo.

El evento fue organizado por el Cidob, y contó con la presencia de Josep Borell, presidente de la institución y ex alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea. La jornada culminará con intervenciones del conseller de Unión Europea y Acción Exterior de la Generalitat, Jaume Duch, y del director del Cidob, Pol Morillas.

Collboni enfatizó el papel histórico de Barcelona en la construcción de relaciones en la región mediterránea, subrayando el apoyo de la ciudad al pueblo palestino y su derecho a la autodeterminación. En su intervención, mencionó su reciente encuentro con Issa Kassis, alcalde de Ramala, en el que discutieron formas de fomentar iniciativas económicas en Cisjordania, argumentando que ello es clave para mantener a la población en su lugar de origen.

El alcalde también recordó las declaraciones de Mark Carney, primer ministro canadiense, quien afirmó que la relación tradicional de su país con Estados Unidos ha cambiado drásticamente, una situación sin precedentes desde la Segunda Guerra Mundial. En este contexto, Collboni manifestó que, la semana pasada, alcaldes de Estados Unidos, Canadá y México se unieron en una voz común contra las políticas de guerra comercial y los aranceles, resaltando así la importancia de las ciudades como intermediarias en tiempos de crisis internacional.

Finalmente, Collboni reafirmó la vocación de Barcelona como "ciudad de diálogo", aspirando a convertirse en un referente de paz y modelo de conversación constructiva. Anunció su participación en el comité ejecutivo de la Unesco, el cual tiene como objetivo establecer una alianza global de ciudades para combatir el racismo y la discriminación, acciones que refuerzan el compromiso de la ciudad con la paz y la inclusión social.