En Barcelona, específicamente en la famosa calle Bruc 49, se ha colocado una placa conmemorativa en honor al ingeniero Ildefons Cerdà, un destacado figura en la historia del urbanismo español. La ceremonia de inauguración tuvo lugar el lunes y fue presidida por el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, quien no dudó en resaltar la influencia y el legado significativo que Cerdà ha dejado en el desarrollo urbanístico de la metrópoli, coincidiendo con el 150 aniversario de su nacimiento.

La emotiva ceremonia estuvo acompañada de diversas personalidades del ámbito académico y periodístico, incluyendo a Pere Calvet, decano del Col·legi d'Enginyers de Camins, Canals i Ports de Catalunya, así como los renombrados periodistas Carles Cols y Lluís Permanyer. También estuvieron presentes representantes municipales, como el concejal del Eixample, Jordi Valls, entre otros miembros de diferentes grupos del Ayuntamiento de Barcelona.

El alcalde Collboni subrayó la importancia de honrar la figura de Cerdà, quien mediante el trazado del Eixample tuvo como prioridad la mejora de la calidad de vida de los barceloneses. En sus palabras, resaltó la relación entre el plan urbanístico de Cerdà y el bienestar de la ciudadanía, algo que, a su juicio, debe ser recordado y celebrado en la ciudad.

La placa conmemorativa ha sido colocada en la entrada de la antigua residencia de Cerdà, en la calle Bruc 49. Esta ubicación fue confirmada gracias a las exhaustivas investigaciones realizadas por los periodistas Carles Cols y Lluís Permanyer, quienes se dedicaron a documentar la historia del ingeniere catalán. Cols destacó la importancia de este reconocimiento, señalando que representa solo el primer paso para reivindicar adecuadamente la memoria de Cerdà.

Sin embargo, no todo fue un motivo de celebración, ya que Cols también expresó su preocupación por la lejanía de la plaza que lleva el nombre de Cerdà, que se encuentra distante en L'Hospitalet de Llobregat. Ambos periodistas coincidieron en que Barcelona aún tiene una deuda pendiente con este visionario ingeniero, y Permanyer hizo un llamado al gobierno municipal para que considere una ubicación más apropiada para la futura instalación de un monumento que rinda homenaje a Cerdà, en respuesta a la solicitud del Col·legi d'Enginyers hecha en 2023.

Pere Calvet, en su intervención, resaltó que Ildefons Cerdà había anticipado conceptos modernos como la "ciudad de los 15 minutos", afirmando que sus ideas eran radicalmente vanguardistas para su época. El plan de Cerdà implica la expansión de Barcelona hacia una urbe más estructurada y funcional, algo que Calvet ensalzó como un avance considerable.

El alcalde Collboni, por su parte, dejó claro su compromiso de ayudar a corregir el "déficit histórico" que Barcelona tiene con Cerdà. Durante su discurso, animó a los asistentes y a la ciudadanía a seguir replanteando la ciudad, inspirados en la misma ambición que guió al ingeniero en su labor. Asimismo, avanzó que la ubicación del tan esperado monumento aún no ha sido decidida, pero esperan tomar una decisión durante su mandato actual.

Finalmente, Collboni destacó el "socialismo utópico" que caracterizó la visión de Cerdà en el diseño urbanístico de la capital catalana, asegurando que su enfoque buscó la equidad en el acceso a servicios básicos y la salud de los ciudadanos. Un reconocimiento que, sin duda, refuerza la importancia de su legado en una ciudad en continua transformación.