El fin de semana, Oriol Junqueras mantuvo un diálogo con Pedro Sánchez, en el que se abordaron diversas cuestiones políticas, aunque la tan mencionada cuestión de confianza no fue uno de los temas discutidos.

Desde Barcelona, el portavoz adjunto y vicesecretario de Comunicación de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Isaac Albert, ha calificado la corrupción como un "problema serio" que afecta directamente la capacidad del Gobierno para llevar a cabo los acuerdos pactados. En este sentido, reclama al presidente del Gobierno de España que asuma responsabilidades y lleve a cabo una depuración de los miembros implicados en escándalos.

Albert subrayó en su rueda de prensa que es esencial que Sánchez y su partido, el PSOE, actúen frente a las acusaciones de corrupción, asegurando que este fenómeno mina la confianza en la democracia y obstaculiza el avance de la agenda legislativa.

En cuanto a las negociaciones, el portavoz de ERC destacó que Junqueras ha estado en contacto con Sánchez y con otros líderes de partidos que forman parte de la coalición de investidura, como Bildu, BNG y Junts, aunque no se ha concretado una reunión oficial entre ambos líderes.

Albert también enfatizó que la posibilidad de una cuestión de confianza "no está en la mesa" en este momento, argumentando que tal decisión recae exclusivamente en el presidente del Gobierno y no en su formación política.

Según Albert, si se presenta la opción de una cuestión de confianza, será porque Sánchez habrá actuado para limpiar a su equipo, y será el presidente quien decida cómo proceder, dejando claro que ERC no es un socio gubernamental, sino un participante en la mayoría de investidura.

Respecto a la posibilidad de elecciones anticipadas, el portavoz de ERC advirtió que la estabilidad del Gobierno no es responsabilidad única de su partido. Dijo que estarán atentos a cómo avanza la agenda legislativa, señalando que la corrupción es un obstáculo que complica la situación actual y que esta materia se ha convertido en una línea roja para ERC.

Albert reiteró la necesidad de que Sánchez ofrezca explicaciones en el Parlamento y pidió la realización de una auditoría en el Ministerio de Transportes, así como el fin de la impunidad para aquellos involucrados en casos de corrupción, añadiendo que las empresas implicadas no deberían poder acceder a licitaciones públicas.

Pese a la gravedad de la situación política en España, el representante de ERC aseguró que continúan negociando con el PSOE sobre el tema de Rodalies, aunque reconoció que esto puede generar ciertas contradicciones en su postura.

Albert expresó su esperanza de que a mediados o finales de la semana se puedan concretar avances en la reestructuración de la empresa Rodalies, aunque no se espera que se designe el nombre del nuevo presidente en ese momento.

Sobre el modelo de financiación, manifestó que se ha progresado, aunque reconoció que han surgido ralentizaciones en las conversaciones con el PSOE en los últimos días.

Finalmente, el portavoz de ERC reafirmó que su partido no se resigna y ejercerá presión máxima para que se cumplan los acuerdos pactados, insistiendo en que tanto el Gobierno central como el Govern catalán deben asumir la responsabilidad de realizar lo que se comprometieron.