Este sábado, alrededor de las 14 horas, un helicóptero turístico se vio obligado a realizar un amaraje a 200 metros del puente en la playa de la Barceloneta, en Barcelona. Las causas de este incidente se están investigando, aunque afortunadamente no se han registrado heridos.

Tanto el piloto como los tres pasajeros a bordo del helicóptero salieron ilesos, y gracias a los flotadores que el aparato logró desplegar, se mantuvo a flote hasta que fueron auxiliados, según informó la policía regional, los Mossos d’Esquadra.

El helicóptero en cuestión es parte de la flota de la compañía Sky Tour Barcelona, la cual ha confirmado esta información a Europa Press, asegurando que sus operaciones continúan con normalidad tras el suceso.

Albert Batlle, teniente de alcalde de Seguridad en Barcelona, ha indicado en declaraciones a los medios que parece que la causa del amaraje podría ser una “avería técnica”, aunque se espera a que las investigaciones den respuestas definitivas.

El funcionario agregó que el rescate se realizó de manera rápida por parte de una embarcación de la Guàrdia Urbana, que ya se encuentra operando en las playas de la ciudad. Todos los ocupantes fueron atendidos sin que ninguno sufriera lesiones, incluyendo el helicóptero, que aunque tuvo un contratiempo, no presentó daños significativos.

Batlle también comentó que la investigación sobre el incidente recaerá sobre la Guardia Civil, y subrayó el hecho de que, a pesar de la situación potencialmente grave, todo concluyó sin mayores problemas, lo que es motivo de alivio.

El helicóptero, que estaba equipado con dispositivos para flotar en el agua, pudo sostenerse adecuadamente al desplegar sus flotadores. Posteriormente, fue remolcado hasta las instalaciones de la empresa, mientras que los pasajeros fueron trasladados al Puerto Olímpico con total seguridad.

En respuesta a este incidente, se movilizaron diversas unidades de servicios de emergencia, incluyendo los Mossos de Seguridad Ciudadana, así como el Grupo de Seguridad Aérea y Salvamento Marítimo, además de la Guàrdia Urbana y los Bomberos de la Generalitat, junto con el Sistema de Emergencias Médicas (SEM).