En Cataluña, el expresidente de ERC y candidato a la reelección, Oriol Junqueras, ha negado cualquier participación en la colocación de un muñeco con su rostro en un puente en Sant Vicenç dels Horts (Barcelona) en 2019, acompañado de la pintada 'Junqueras púdrete en la cárcel'. Se ha defendido afirmando que sería imposible que alguien como él llevara a cabo algo así, especialmente mientras estaba en medio del juicio del 1-O, con días de hasta 10 horas de audiencia y sin poder comunicarse con su familia.

Considera que es injusto que se le haya atribuido esta acción, la cual supuestamente fue impulsada por la 'estructura B' de su partido. Junqueras ha reiterado su total desmentido y ha enfatizado que nunca ha pedido al presidente de la Generalitat, Salvador Illa, mantener en su cargo a funcionarios nombrados por ERC.

En relación a si ha rechazado reunirse con alguna candidatura al proceso congresual de ERC, Junqueras ha negado tal afirmación y ha indicado que está dispuesto a reunirse con cualquier persona, incluida la secretaria general, Marta Rovira. Afirma que siempre ha estado abierto a dialogar con todos y que está dispuesto a demostrarlo ahora.