En una reciente rueda de prensa celebrada en Barcelona, la presidenta de la Associació Catalana de Municipis (ACM), Meritxell Budó, anunció la apertura de una nueva oficina en Bruselas, en la Casa Europea de los Municipios. Esta decisión busca potenciar la representación del municipalismo catalán dentro de la esfera europea y tener una influencia efectiva en las políticas que afectan a estas entidades locales.

Budó explicó que la finalidad de esta oficina es estar presente "donde se toman las decisiones", lo que permitirá trabajar de forma colaborativa y llevar a cabo una incansable labor de incidencia política que consideran esencial. La ACM pretende que los municipios catalanes se involucren activamente en los procesos legislativos europeos, así como en las consultas públicas sobre diversas iniciativas.

Esta iniciativa forma parte del plan de mandato de Budó, que tiene como uno de sus ejes fundamentales la internacionalización. La inauguración de la nueva oficina se prevé para septiembre u octubre de este año. Hasta ahora, más del 70% de las normativas que afectan a los municipios catalanes provienen de la legislación europea, lo que subraya la importancia de contar con una voz dentro de la UE.

La presidenta de la ACM enfatizó la necesidad de esta "antenna" en Europa para proyectar la voz de Cataluña y ayudar a los municipios que deseen desarrollar proyectos con financiación europea. La oficina estará en la búsqueda activa de líneas de financiamiento que faciliten a los ayuntamientos el acceso a convocatorias, especialmente en áreas clave como la transición ecológica y la cohesión social.

Jordi Solé, exeurodiputado y actual director de la oficina, aportará su vasta experiencia, habiendo desempeñado varios cargos relevantes en el ámbito político europeo, incluido su papel como alcalde y diputado en el Parlament. Al ser cuestionado sobre las demandas más apremiantes de los municipios ante la UE, Solé destacó que la financiación sigue siendo la principal prioridad, señalando la necesidad de obtener recursos y participar en programas europeos.

La nueva oficina se ubicará en una importante zona de Bruselas, la Casa Europea de los Municipios, que alberga a diversas federaciones y asociaciones de toda Europa. Estar en este entorno permitirá a la ACM aumentar su influencia política y fortalecer la representación de los municipios catalanes ante las instancias decisorias de la UE.

Además de su rol institucional, la ACM también busca compartir experiencias exitosas con otras organizaciones, así como potenciar su presencia en foros de discusión y formar alianzas estratégicas con actores relevantes en Bruselas. Para ello, se propone coordinarse con las instituciones catalanas ya presentes, como la delegación del gobierno de Cataluña y otros representantes en el ámbito europeo, con el objetivo de maximizar esfuerzos y recursos en beneficio de los municipios catalanes.