El expresidente catalán José Montilla ha expresado su rechazo absoluto a los recientes abucheos y lanzamientos de objetos dirigidos hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el Rey, en un acto celebrado en Paiporta. Montilla considera que estas acciones son "absolutamente reprobables" y no deberían tener cabida en una sociedad democrática.

Durante una entrevista en Ser Catalunya, Montilla criticó la falta de diligencia por parte del Gobierno de la Generalitat Valenciana, dirigido por Carlos Mazón, al no avisar de forma adecuada sobre la llegada de la DANA, un fenómeno meteorológico que provocó importantes consecuencias en la región. Según el expresidente, la información debía haber sido transmitida con anticipación para que los ciudadanos pudieran tomar las decisiones necesarias. "Los avisos y alertas no se tramitaron con la urgencia necesaria", sentenció.

Montilla argumentó que muchos de los problemas generados por la DANA eran evitables. "Si yo hubiera sido presidente, esa situación no hubiera ocurrido porque se deben solicitar recursos cuando se sabe que no se cuentan con los suficientes", destacó, señalando la responsabilidad del actual Gobierno regional en estos hechos. Criticó también el desmantelamiento de la Unidad Valenciana de Emergencias, un recurso clave en la gestión de crisis como la que se vivió, lo que, en su opinión, contribuyó a la tardanza en la solicitud de ayudas.

El expresidente mostró especial preocupación por el hecho de que no se pidieran refuerzos de manera inmediata, incluso "cuando esa misma noche ya se conocía la magnitud del desastre". Recordó un episodio similar en Catalunya durante su mandato, cuando ante la sequía pidió apoyo al Estado de forma rápida y efectiva.

Si bien reconoció la ira y frustración de la población afectada por la situación de emergencia, Montilla no dudó en condenar los actos de violencia y agresión que se dieron en el evento. "Es incomprensible que un partido político ofrezca apoyo jurídico gratuito a quienes agredieron a Sánchez", refiriéndose a Vox, lo que consideró una postura completamente inaceptable.

En relación a la financiación y el acuerdo entre PSOE y ERC, el expresidente defendió que lo que se busca es incrementar la autonomía en la gestión de los recursos para Catalunya, aunque a su juicio, "no se trata de un concierto económico". Montilla subrayó que, aunque pueda haber algunas similitudes, el concepto de concierto económico pertenece a un modelo específico, como es el del País Vasco, que no debe confundirse con la situación catalana.

Montilla también se refirió a la llegada de Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat, elogiando su liderazgo y señalando que, a su entender, el proceso independentista ha culminado y es improbable que regrese a las circunstancias que se vivieron en el pasado. Hizo una crítica hacia aquellos partidos que aún insisten en una vía unilateral, sugiriendo que no comprenden la realidad actual.

Finalmente, en cuanto a las elecciones estadounidenses, el expresidente expresó su preocupación ante la posibilidad de un nuevo mandato de Donald Trump, argumentando que su victoria podría tener repercusiones en Europa. "No sería una buena noticia para los americanos ni para el resto del mundo, a excepción de Putin", concluyó Montilla, resaltando la interconexión entre la política estadounidense y europea.