Recientes informes sobre el estado de los embalses en Cataluña reflejan una mejora significativa en la acumulación de agua, gracias a las lluvias de las últimas semanas. Los embalses del sistema Ter-Llobregat, cruciales para el suministro de agua de Barcelona y Girona, han superado ya el umbral del 60%, alcanzando un 60,4% de sus reservas. Esto equivale a un total de 369,740 hectómetros cúbicos de agua almacenada.

Según el último reportaje de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), los datos han mostrado un crecimiento constante desde el comienzo de la semana. Para poner esto en perspectiva, el lunes los embalses estaban al 57,4%, mientras que en el reporte de la semana pasada la cifra se situaba en un 50,19%.

En un desglose por embalses, el de Darnius-Boadella ha registrado un notable aumento hasta el 61,3%, en comparación con el 43% reportado el lunes. Igualmente, el embalse de Sau ha llegado al 63,1%, subiendo desde un 41,5%; mientras que Susqueda se encuentra en un 43,3%, una leve mejora respecto al 41,9%. Otros embalses como La Baells incluso alcanzan un impresionante 95,5%, creciendo considerablemente desde el 81,4% de la semana anterior.

Por su parte, el embalse de Sant Ponç ha subido a un 74,1%, en contraste con el 65,2% que tenía el comienzo de la semana. Foix se mantiene prácticamente al 100,6%, mientras que Siurana y Riudecanyes han registrado incrementos, ahora al 22% y 48,5% respectivamente, comparado con cifras anteriores de 16% y 36,8%.

En términos generales, las reservas de las cuencas internas de Cataluña se sitúan actualmente en el 59,9% de su capacidad, que equivale a 416,2 hectómetros cúbicos. Esta cifra representa un incremento de 3 puntos desde el 56,9% que se reportó el lunes, lo que sugiere un panorama más alentador para la gestión del agua en la región.