El otoño de 2024 en Catalunya ha destacado por ser el más lluvioso en los últimos seis años, rompiendo con la tendencia de sequías que se había registrado en años anteriores. La Agencia Española de Meteorología (Aemet) ha informado que este año, en términos de precipitaciones, se ha alcanzado un notable superávit, algo que, sin duda, es una buena noticia para una región que atraviesa periodos de severa aridez.

Según declaraciones realizadas en una reciente rueda de prensa por Ramón Pascual, delegado de Aemet en Catalunya, el año 2024 también ha sido calificado como "extremadamente cálido", caracterizándose por un clima que oscila entre lo húmedo y lo muy húmedo. Se anticipa que enero y febrero de 2025 mantendrán temperaturas superiores a la media, acompañadas de lluvias considerables que se alinean con la normalidad esperada para esta época del año.

Pascual señaló que 2024 ha sido un año que continúa la serie de temperaturas elevadas que se ha mantenido desde 1940, aunque aún persiste el desafío de la sequía, ya que los tres años previos fueron marcados por condiciones excepcionalmente secas. A pesar de esta recuperación en las precipitaciones, no hay que bajar la guardia, según el meteorólogo.

Beatriz Téllez, jefa de Climatología de Aemet en Catalunya, respaldó estas afirmaciones al comentar que 2022, 2023 y 2024 han sido los años más cálidos registrados desde 1940. Aunque los últimos once meses reflejan una ligera disminución en las temperaturas extremas, estas siguen ubicándose en niveles completamente anómalos. Las temperaturas elevadas se han observado de manera persistente desde enero hasta mediados de abril, y también en la segunda parte del verano, con varios picos significativos a lo largo del año.

A medida que el año avanza, Téllez destaca que 2024 ha sido un año entre húmedo y muy húmedo, con un promedio de 716 milímetros de lluvia en toda Catalunya. Este aumento en las precipitaciones ha sido particularmente notable en la provincia de Tarragona, mientras que localidades como Girona han experimentado condiciones más alineadas a los valores normales, de acuerdo con el histórico que se remonta a 1991.

El pasado otoño ha sido clasificado por Téllez como uno de los quince otoños más cálidos registrados, con una temperatura media de 14,6 grados. A pesar de estar por debajo de los 16 grados alcanzados en años anteriores, este dato refleja un entorno cálido que continúa la tendencia observada en las últimas décadas.

Téllez también subrayó el contraste climático entre los diversos meses de otoño, donde septiembre mantuvo un ambiente frío, octubre fue más cálido, y noviembre presentó temperaturas notablemente altas. Este contraste contribuye a la complejidad del clima en la región y a la variabilidad de las estaciones.

En términos de precipitaciones, este otoño, Catalunya ha recibido 292 milímetros de lluvia, superando ampliamente las cifras de años anteriores y consolidándose así como el más lluvioso en el último lustro. Esto contrasta fuertemente con los apenas 113 milímetros registrados en 2023, lo que resalta la importancia de este cambio climático en el contexto regional.

Téllez finalizó su análisis afirmando que este otoño ha sido "menos cálido y más húmedo" que los anteriores. Las lluvias, que alcanzaron hasta 800 milímetros en estaciones específicas como la de Ports en Tarragona, han sido bienvenidas especialmente en zonas donde los recursos hídricos eran escasos.

Por otro lado, las inclemencias meteorológicas ocasionadas por la DANA a finales de octubre y principios de noviembre impactaron especialmente en Catalunya, generando afectaciones en el sur de Tarragona y áreas costeras de Barcelona. Este tipo de eventos son una prueba más de la volatilidad del clima actual en la región.

Asimismo, se ha registrado que el 25 de octubre fue el día más lluvioso de este año en Catalunya, con una impresionante cifra de 27,3 milímetros de lluvia en un solo día, evidenciando la intensidad de las precipitaciones en ciertas áreas.

Finalmente, el jefe del grupo de Predicción y Vigilancia de Aemet en Catalunya, Ibai Campo, comentó que se prevé un descenso adicional de las temperaturas durante este fin de semana, con máximas que no superarán los 8 grados en algunas zonas y expectativas de lluvias ligeras. Durante las festividades navideñas, se anticipa un clima despejado, aunque con posibles brumas matinales y un notable enfriamiento nocturno que podría causar heladas en el interior.