El presidente de la Fundació Ibn Battuta y exdiputado del PSC, Mohammed Chaib, ha hecho un llamado a la inclusión y a la cohesión en la sociedad catalana. Según sus declaraciones, es fundamental que Catalunya gestione adecuadamente la diversidad de su población, ya que la falta de integración de los jóvenes de diferentes orígenes podría representar un grave problema para la cohesión social.

Esta afirmación surge a raíz de su participación en el Iftar, una cena que marca el final del ayuno durante el Ramadán, que tuvo lugar recientemente en Barcelona. En este evento, que contó con la presencia de representantes del cuerpo consular y diversas entidades de la sociedad civil, Chaib se hizo eco de la importancia de atender las necesidades de las comunidades diversas en temas como la educación y el empleo.

Chaib destacó que muchos jóvenes de origen musulmán, a pesar de haber crecido en Catalunya, se sienten discriminados y creen que su procedencia afecta negativamente sus oportunidades. Ante esta situación, hizo un llamado a las administraciones para garantizar su integración plena en todos los sectores de la sociedad.

Planteando su experiencia como el primer diputado musulmán en el Parlament de Catalunya, Chaib enfatizó que la inclusión de estas comunidades debería comenzar por la esfera política. Instó a que todos los partidos democráticos integren a personas de orígenes diversos en sus filas, subrayando que la fortaleza de la cultura catalana radica precisamente en su diversidad.

De acuerdo con Chaib, es crucial que los inmigrantes y sus descendientes encuentren su voz en la política, la economía y la cultura. Abogó por que las trayectorias de individuos de diversas procedencias sean reconocidas y celebradas en Catalunya, como históricamente se ha hecho con otras comunidades.

El exdiputado también expresó su preocupación ante la retórica de partidos como Vox, advirtiendo que no se debe atribuir a la comunidad musulmana la culpa de los problemas sociales. Reiteró que el miedo y la desconfianza hacia estas comunidades no son justificados y pidió que se mantenga un diálogo abierto y constructivo.

Chaib recordó una reciente demanda interpuesta por su organización contra un comentario que consideró de odio, subrayando la importancia de la libertad de expresión, pero también el deber de proteger a aquellos que puedan sentirse atacados por su identidad o religión.

Respecto a la comunidad musulmana, Chaib destacó que esta religión goza de un reconocimiento significativo en España, con una población considerable en Catalunya que contribuye al tejido social del país. En el marco del Iftar, enfatizó la importancia de la convivencia interreligiosa y el compromiso con la comunidad en su conjunto.

Con respecto al Ramadán, Chaib lo describió como un periodo de reflexión y solidaridad con los más desfavorecidos, y sugirió que sería beneficioso adaptar los horarios laborales para facilitar la práctica del ayuno, aunque reconoció que esto representa un desafío en la práctica.

Por último, abordó la situación en Palestina, expresando su apoyo a la comunidad palestina y demandando un cese del sufrimiento y la violencia. Chaib enfatizó que la paz es el deseo común de los pueblos, pero que su consecución requiere un esfuerzo conjunto y el deseo de ambos lados de vivir en armonía.