En un esfuerzo por modernizar su infraestructura, Endesa ha iniciado un importante proyecto de actualización tecnológica en la red de media tensión que abastece a cinco barrios de Girona. Esta iniciativa busca mejorar la fiabilidad del suministro eléctrico para aproximadamente 11.000 usuarios, asegurando que cuenten con un servicio de calidad superior.

La compañía ha invertido un total de 362.000 euros en estas obras, un desembolso que ha sido asumido por Endesa, según un comunicado emitido el pasado martes.

Las mejoras se están realizando en los barrios de Mercadal, Carme-Vista Alegre, la Devesa, Pla de Palau-Sant Pau (Eixample norte) y Pedret. Estas zonas se beneficiarán de una revitalización considerable de su infraestructura eléctrica.

Entre las intervenciones más significativas se incluye la sustitución de las antiguas líneas eléctricas de media tensión, que ya habían cumplido su ciclo de vida, por nuevas instalaciones de última tecnología. Asimismo, se contempla la renovación de los centros de transformación para optimizar el funcionamiento de la red.

Un aspecto destacado de estas obras es el aumento de la tensión en algunas partes del cableado, que ha pasado de 11 kV a 25 kV. Esta mejora permitirá contar con una red más robusta, capaz de gestionar más energía y ofrecer un suministro aún más eficiente a los ciudadanos.