En un reciente desarrollo en el ámbito político de Cataluña, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha manifestado su postura respecto a las infiltraciones policiales dentro de los movimientos sociales e independentistas. Durante una sesión de control en el Parlament, llevada a cabo el pasado miércoles, Illa dejó claro su deseo de que se aclaren estas situaciones, siempre que se hayan producido al margen del Estado de derecho.

Las afirmaciones de Illa surgieron en respuesta a cuestionamientos planteados por los grupos parlamentarios de ERC y la CUP, que expresaron su preocupación por el manejo de estas infiltraciones. El presidente del Govern enfatizó que su administración "defiende y promueve" la investigación exhaustiva de cualquier actuación que no se atenga a la legalidad vigente, asegurando que tales casos deben ser tratados en las instancias judiciales correspondientes.

En un punto del intercambio, Illa rechazó la idea de que sea responsabilidad de su gobierno exigir la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en el Parlament para abordar estos temas, subrayando además que no tiene conocimiento de la existencia de otros agentes estatales infiltrados ni de las actividades de los Mossos d'Esquadra en este sentido.

Por su parte, Josep Maria Jové, líder del grupo de ERC, aprovechó la ocasión para instar a Illa a tomar medidas frente a las infiltraciones y el espionaje vinculado al programa Pegasus, que ha afectado al independentismo. Jové criticó a Illa y al PSC, acusándolos de justificar acciones legales contra representantes independentistas relacionadas con el proceso soberanista.

En respuesta a estas acusaciones, Illa admitió que no todo es perfecto y reconoció la necesidad de mejoras en ciertos aspectos. No obstante, se comprometió a garantizar que todos los ciudadanos tengan la posibilidad de defender sus proyectos políticos, incluso aquellos con los que no está de acuerdo, siempre dentro del marco legal establecido.

En otro momento intenso de la discusión, Pilar Castillejo, diputada de la CUP, reprochó a Illa las declaraciones de la consellera y portavoz del Govern, Sílvia Paneque, quien había afirmado que las acciones de los cuerpos policiales "se adecuan al marco normativo vigente con las garantías existentes". Castillejo interpretó estas palabras como una aparente aprobación de la práctica de infiltrarse y formar relaciones personales con ciudadanos que ignoraban que estaban involucrados con agentes de la policía.

Ante estas afirmaciones, Illa respondió con firmeza, señalando que esa interpretación es incorrecta. "Se equivoca", manifestó. "El Govern de Cataluña avala el cumplimiento del Estado de derecho y promueve la investigación de todo lo que se desvíe de este marco". Con estas declaraciones, Illa intentó reafirmar su compromiso con la legalidad y la transparencia en el ejercicio de las funciones policiales.