En un giro interesante de acontecimientos, se ha revelado que el antiguo encargado de Cumplimiento de ERC, Lluís Mombiela, se reunió el pasado miércoles con su predecesor, Xavier Mombiela, para recibir documentos esenciales relacionados con la controvertida investigación sobre la estructura B del partido. Este caso también abarca los escandalosos carteles que atacaron a los hermanos Maragall, vinculando su nombre a la enfermedad de Alzheimer.

Este encuentro se produjo en un contexto de creciente preocupación, dado que el nuevo responsable había manifestado no haber podido localizar los documentos críticos que su antecesor había guardado. Tras enterarse de esta situación, Xavier Mombiela decidió entregarle la información necesaria, tanto en formato digital como impreso, para permitir una continuación adecuada de la investigación.

El nuevo encargado no solo se limita a revisar la documentación proporcionada, sino que tiene la intención de incorporar "nuevas diligencias". Esto significa que la investigación seguirá avanzando bajo su supervisión, lo que le permitirá añadir o repetir declaraciones, fomentando así una exploración más exhaustiva del asunto.

Cabe recordar que, en diciembre del año pasado, el antiguo responsable de Cumplimiento había realizado un informe provisional sobre la investigación. Ahora, se espera que el nuevo encargado continúe esta labor hasta culminar en un documento final, que posteriormente será evaluado por la comisión de Garantías de ERC.

Xavier Mombiela, por su parte, ha dejado claro a través de un comunicado en la plataforma ‘X’ que no ha "eliminado ni ocultado ningún documento" relacionado con la investigación. Sostiene que utilizó herramientas proporcionadas por el propio partido para almacenar dicha información en un lugar de acceso exclusivo para él, enfatizando que su interés era preservar la confidencialidad de los datos en cuestión.

En su exposición, Mombiela ha señalado que siempre se ha esmerado en evitar que la información relacionada con la investigación estuviera almacenada en carpetas o aplicaciones a las que miembros de la dirección de ERC o terceros vinculados al partido pudieran acceder. Esta decisión, argumenta, estuvo motivada por la necesidad de mantener la seguridad de la información en un entorno sensible.

Finalmente, ha compartido que, justo un día antes de ser cesado debido a una pérdida de confianza por parte de la nueva dirección del partido, realizó una copia de seguridad de todos los archivos. Mombiela justificó esta acción al considerar que la seguridad de la información podía estar comprometida, además de alimentar su sospecha de que sería destituido y, por lo tanto, se vería obligado a traspasar esa información crítica.