BARCELONA, 11 de abril.

La organización empresarial Pimec ha revelado que, tras meses de aumento, el índice de precios al consumidor (IPC) en España ha bordeado una leve disminución en marzo, situado ahora en un 2,3%. Esta cifra se acerca al objetivo de inflación a largo plazo establecido por el Banco Central Europeo (BCE), que es del 2%. El anuncio fue realizado este viernes mediante un comunicado oficial.

Según Pimec, esta reducción en la inflación se debe principalmente a la desaceleración del aumento de los precios de la vivienda. En particular, se ha observado una notable reducción en los costos de servicios esenciales como la calefacción y la electricidad, que pasaron de un incremento del 28,1% en el mes anterior a un 12,8% actualmente. Asimismo, los precios de los combustibles han mostrado una tendencia a la baja.

A pesar de este leve respiro en los índices de inflación, Pimec advierte que hay varios elementos que podrían poner en riesgo la estabilidad económica en los próximos meses. La presión de aranceles impuestos a nivel global, especialmente el 25% que EE.UU. prevé sobre los vehículos, junto con posibles represalias que podrían llevar a un alza general del 20% en otros sectores, son factores de atención, sobre todo si las negociaciones fracasan.

La patronal ha subrayado la importancia de no subestimar los efectos colaterales que esto puede tener sobre los salarios y los costes de las empresas, ya que podrían afectar la percepción pública sobre la estabilidad futura de los precios.

No obstante, Pimec destaca que una posible estabilización en los precios de la energía, junto con una política monetaria más laxa del BCE, podría ser favorable para fomentar el crecimiento económico, siempre y cuando continúen las tendencias actuales de moderación en la inflación.