Barcelona, 25 de julio.

En un informe reciente de los resultados financieros del Grupo Volkswagen, se dio a conocer que Seat ha finalizado el primer semestre con un marcado descenso en su beneficio operativo, que ahora se sitúa en 38 millones de euros, lo que representa una caída del 91% en comparación con el mismo período del año anterior.

Las marcas Seat y Cupra reportaron unas ventas conjuntas de 322.000 vehículos, experimentando una reducción del 6.4% respecto al año anterior. A su vez, los ingresos generados por estas ventas sumaron 7.6 millones de euros, lo que equivale a una disminución del 2% en relación al mismo lapso de 2022.

A pesar de las cifras negativas, las entregas de ambos fabricantes alcanzaron un total de 302.583 unidades, logrando un incremento del 1.7% si se compara con las 297.418 entregas del año pasado.

El Grupo Volkswagen ha señalado que las marcas enfrentan una creciente competencia en sus mercados más relevantes, además de tener que adaptarse a cambios en la oferta de productos.

También se ha indicado que la caída en los resultados se ve agravada por los aranceles impuestos por la Unión Europea al modelo Cupra Tavascan, que se fabrica en China, así como por un aumento en los costos de los materiales utilizados.