Barcelona, 24 de octubre. Esta madrugada, se llevó a cabo un simulacro inquietante en la región de Manresa, específicamente en la entrada del túnel de Viladordis, donde se puso a prueba la coordinación de las autoridades ante un posible desprendimiento de tierra. En total, 125 profesionales, incluyendo fuerzas de seguridad, cuerpos de emergencia y voluntarios, se unieron para simular un escenario de crisis en el que gran parte de la población tenía que ser atendida.

El ejercicio práctico imaginó un desprendimiento que afectó a un tren que estaba ingresando por la boca norte del túnel. Este tren transportaba a 50 personas, de las cuales 40 sufrieron diversos tipos de lesiones como traumatismos, quemaduras y contusiones. Esta información fue proporcionada por Protecció Civil a través de un comunicado oficial este viernes.

La atención médica fue gestionada por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), que respondió rápidamente a la situación. Tras recibir la notificación a través del 112, el SEM activó varias unidades de intervención y se puso en marcha el protocolo de Incidente de Múltiples Afectados, movilizando a 25 profesionales y 10 unidades, que incluían especialistas en salud mental para atender a los afectados.

Asimismo, la participación de los Mossos d'Esquadra fue notable, con cuatro unidades de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USC) en el lugar del simulacro. Por su parte, Protecció Civil desempeñó un papel importante al proporcionar recursos logísticos y atención a los familiares de los "afectados", mientras que Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) también estuvo presente con aproximadamente 15 miembros de su equipo.