El líder de CCOO, Unai Sordo, ha lanzado críticas hacia las pronunciamientos de la Unión Europea respecto a la oferta pública de adquisición (OPA) que BBVA ha presentado para Banco Sabadell. Según él, las declaraciones de Bruselas suelen estar más influenciadas por intereses cercanos que por una verdadera evaluación del mercado europeo.

Durante una conferencia de prensa celebrada en Barcelona, Sordo estuvo acompañado por la secretaria general de CCOO Catalunya, Belén López, y el secretario general de la Federación de Servicios, Ramón González. En su intervención, el secretario de CCOO destacó que la decisión del Gobierno de someter la OPA al Consejo de Ministros es un paso natural en este proceso, aunque lamentó que en ocasiones se tergiversen las posturas de la CE.

Las voces oficiales de la Comisión Europea han manifestado que no existe base para bloquear la OPA, reiterando que estarán atentas a garantizar que cualquier determinación se ciña a las normativas europeas vigentes. Sin embargo, Sordo no ha dudado en subrayar que muchas veces lo que se dice en Bruselas no refleja la realidad de lo que verdaderamente ocurre en España, aseverando que parece que se está utilizando el nombre de la UE como un muñeco de ventrílocuo en vez de como un organismo soberano.

Sordo también hizo hincapié en la responsabilidad del Gobierno de intervenir en la fusión propuesta, sugiriendo que debe estar dispuesto a actuar según estime conveniente. Recordó que el ejecutivo de Pedro Sánchez tiene la capacidad de influir en la dirección de movimientos empresariales que podrían impactar negativamente en la economía nacional.

Además, el secretario de CCOO advirtió que el proceso de concentración en el sector financiero español ha alcanzado niveles preocupantes en la última década, lo que podría generar consecuencias y riesgos para el sistema en general. Por su parte, González corroboró la postura de Sordo, añadiendo que las declaraciones de la CE pueden estar rodeadas de intereses específicos que no siempre benefician a la ciudadanía.

Al abordar la cuestión del empleo en el contexto de la fusión, González valoró positivamente la intención del Ministerio de Trabajo de salvaguardar los puestos de trabajo y mantener la red de servicios financieros intacta, sugiriendo que este tipo de medidas son cruciales para asegurar el bienestar colectivo.