BARCELONA, 14 (EUROPA PRESS)

Álvaro Aguado, jugador del RCD Espanyol, ha presentado su defensa este miércoles ante la magistrada del Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona en relación con la acusación de agresión sexual realizada por una compañera de trabajo del club. Según informan fuentes del ámbito judicial, el futbolista ha afirmado que la relación que mantuvieron fue consensuada.

El centrocampista se presentó como investigado debido a un incidente ocurrido el 23 de junio de 2024, en una fiesta celebrada en la discoteca Opium de Barcelona para conmemorar el ascenso del equipo a la primera división. Durante su comparecencia, que se prolongó cerca de una hora, Aguado manifestó no comprender la razón detrás de la denuncia, admitiendo que la relación tuvo lugar en un lavabo del establecimiento nocturno, pero que fue "en todo momento consensuada".

El jugador únicamente respondió a las preguntas formuladas por la Fiscalía y la jueza, rehusando a contestar a las de la acusación particular. Reveló que había tenido conocimiento de la acusación a través del club, lo que añade un matiz relevante a la evolución del caso.

Curiosamente, ni la Fiscalía ni la acusación particular han considerado necesario solicitar medidas cautelares. Se ha comunicado que la denunciante, quien sigue siendo parte del mismo equipo, no ha pedido una orden de alejamiento, dado que sus horarios laborales no coinciden con los de Aguado.

En un giro de los acontecimientos, la denunciante reafirmó su versión de los hechos recientemente ante la instructora del caso. Sin embargo, no se ha cuestionado el retraso en presentar la denuncia, lo que podría complicar el proceso judicial. Adicionalmente, se ha informado que ha sido imposible recuperar las grabaciones de las cámaras de seguridad de la discoteca, debido a que han transcurrido más de treinta días desde la fecha del suceso.

Se espera que otros empleados del club que asistieron a la celebración testifiquen en relación con el incidente, lo que podría aportar más claridad al caso que sigue generando expectación en el entorno deportivo.