La presidenta del grupo parlamentario de la CUP en Cataluña, Pilar Castillejo, ha manifestado su intención de interponer una demanda contra el Estado de Israel, acusándolo de secuestro tras ser detenidos al participar en la Flotilla Global Sumud.

Castillejo realizó estas declaraciones en una entrevista con 'Nació Digital', la cual fue reproducida por Europa Press. En el mismo espacio, también participó Jordi Coronas, concejal de ERC en Barcelona y miembro de la Flotilla, quien opina que este evento podría convertirse en un “cambio decisivo” para la juventud que, según él, tiende a inclinarse hacia posturas de extrema derecha.

Al respecto, la líder de la CUP ha señalado que la denuncia se presentará de manera colectiva y ha manifestado la expectativa de contar con el respaldo de “los servicios jurídicos del Parlament”.

Castillejo no ha dudado en calificar a Israel como un estado que refleja la extrema derecha y sostiene que las manifestaciones en solidaridad con Gaza y la Flotilla son una reacción ante lo que ella describe como un modelo imperialista.

Coronas ha resaltado la importancia de que la juventud se movilice en defensa de los derechos y libertades, considerándolo un aspecto fundamental de este movimiento.

Según Castillejo, la Flotilla siempre tuvo en cuenta la necesidad de mantener “una dimensión mediática”, con el objetivo de presionar a los gobiernos y alentar a la gente a manifestarse en las calles.

Por otro lado, Coronas ha afirmado la necesidad de "paralizar el país" durante la huelga general programada en Cataluña para el 15 de octubre, con el fin de obligar al Gobierno central a adoptar medidas enérgicas contra Israel.

En relación a su tiempo de retención, Castillejo ha subrayado que, a su juicio, su situación era privilegiada en comparación con el trato que reciben los “ciudadanos libres en Palestina” que, dice, son tratados aún peor en estas circunstancias.

Coronas, por su parte, ha recordado que las violaciones a los derechos humanos eran más severas para activistas en países como Túnez, Libia o Turquía, lamentando que “incluso en el castigo a la Flotilla estaba presente el racismo”.