El comienzo de la temporada navideña en Barcelona se marcó el pasado sábado con un evento especial, donde el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, junto a su homólogo de Belén, el palestino Maher Canawati, encendió las luces festivas en el emblemático paseo de Gràcia. Este acto simboliza más que la iluminación; representa un momento de unión y celebración cultural en la ciudad.

En paralelo, la celebración se extendió a diversos distritos de Barcelona, donde se llevaron a cabo actos de encendido que incluyeron actividades y espectáculos en áreas como Sants-Montjuïc, Les Corts, Sarrià-Sant Gervasi, Gràcia, Horta-Guinardó y Sant Andreu, lo que refleja un esfuerzo por integrar a todas las comunidades en estas festividades.

El evento principal en el paseo de Gràcia, organizado por Jordi Duran y producido por Brava Arts bajo la dirección de Pep Anton Gómez, fue un espectáculo vibrante que incluyó la interpretación del villancico 'Un cor que batega', cantado por un grupo diverso que abarcaba desde niños de ocho años hasta adultos de noventa y ocho, resaltando el espíritu inclusivo de la celebración.

La iluminación navideña de Barcelona, bajo el concepto 'Barcelona Llums de Nadal', se presenta con cinco innovadores diseños que adornan las principales arterias de la ciudad, incluyendo la emblemática plaza Catalunya y la Gran Via. Este año, la ciudad se ha iluminado de manera más extensa, añadiendo 16 kilómetros de nuevas luces, destacando la renovada Via Laietana que ahora brilla con más esplendor que nunca.

Una novedad importante este año fue la antelación en la fecha del encendido, que se celebró antes del último jueves de noviembre, para evitar la coincidencia con la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, que se desarrollará del 29 de noviembre al 7 de diciembre, donde Barcelona será la ciudad invitada de honor. Esta decisión pone de manifiesto un enfoque proactivo en la planificación de eventos culturales de importancia para la ciudad.