El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha presentado su nuevo plan de expansión del servicio de electrolineras, con el objetivo de ampliar los puntos de carga pública para vehículos eléctricos. Según el plan, en 2024 el AMB contará con una de las redes metropolitanas públicas de electrolineras de carga rápida más grandes del sur de Europa.
El plan prevé pasar de las 10 electrolineras actuales a un total de 102, que podrán dar servicio y cargar simultáneamente 367 vehículos eléctricos. De estas 102 electrolineras, habrá 63 de carga rápida, 11 de carga semirrápida y 28 solares. El plan de expansión tiene un coste global de 4 millones de euros, siendo 2 millones de euros provenientes de subvenciones del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
Carlos Cordón, vicepresidente de Movilidad, Transporte y Sostenibilidad del AMB, ha explicado que este plan responde a las necesidades y demandas de los ciudadanos, quienes solicitan más infraestructuras y puntos de carga para vehículos eléctricos. El objetivo del AMB es facilitar las alternativas y el cambio de hábitos para lograr una movilidad más sostenible y limpia en la metrópolis de Barcelona, contribuyendo así al cumplimiento del Plan metropolitano de movilidad urbana (PMMU) 2019-2024.
Para llevar a cabo esta ampliación, el AMB instalará 45 nuevas electrolineras de carga rápida y semirrápida, financiadas con fondos FEDER. Asimismo, el servicio de electrolineras del AMB también incorporará 28 electrolineras solares, 10 municipales actualmente gestionadas por los ayuntamientos y 8 de la red de TMB.
A partir de 2024, el servicio Electrolineras AMB dejará de ser gratuito y se establecerán tarifas en función del tipo de carga (normal, semirrápida, rápida y ultrarrápida). Por ejemplo, la tarifa por uso en un punto de carga normal será de 0,24 euros el kilovatio hora por la energía consumida y 0,012 euros por minuto a partir del minuto 120 de uso.
En resumen, el AMB ha presentado un ambicioso plan de expansión de su red de electrolineras, con el objetivo de ofrecer más puntos de carga pública para vehículos eléctricos en la metrópolis de Barcelona. Este proyecto contribuirá a fomentar una movilidad más sostenible y limpia en la ciudad, siendo además financiado en parte por subvenciones del FEDER. A partir de 2024, el servicio de electrolineras pasará a ser de pago y se establecerán tarifas basadas en el tipo de carga utilizada.