Barcelona, 10 de septiembre. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha llevado a cabo este miércoles la presentación de su renovada imagen corporativa y su estrategia comunicativa, con la intención de ajustarse a las nuevas dinámicas políticas que enfrenta la sociedad catalana. Este giro se apoya en la necesidad de adoptar un mensaje más accesible y directo.

La secretaria general del partido, Elisenda Alamany, junto al portavoz adjunto y vicesecretario de Comunicación, Isaac Albert, expuso que el propósito es acercarse a la ciudadanía, abordando no solo sus problemas, sino también sus emociones, empleando formatos que resulten más contemporáneos y atractivos.

Este cambio de imagen se fundamenta en un análisis reflexivo sobre la situación actual del partido y de Catalunya, lo que llevó a la dirección a considerar pertinente lanzar esta iniciativa en vísperas de la Diada de Catalunya.

En el ámbito comunicativo, ERC se propone simplificar su lenguaje, con un enfoque especial en las redes sociales, donde se busca una interacción más clara y directa: "Queremos hablar más de la gente y menos de los partidos", destacó Alamany.

La dirección del partido ha identificado una desconexión entre ERC y las inquietudes ciudadanas, observando que su mensaje había perdido frescura y estaba excesivamente centrado en las actividades institucionales. Por ello, planean adoptar un habla más similar a la de la gente común, reflexionando sobre los temas que verdaderamente les interesan.

El objetivo es incrementar su relevancia en las plataformas sociales, donde, según han indicado, la derecha y la extrema derecha tienen una notable presencia. Quiere reforzar la imagen de modernidad del partido y adecuarse a las expectativas de los nuevos votantes, de acuerdo a los cambios en los hábitos de la sociedad: "Debemos comprometernos en las batallas necesarias", afirmó Alamany.

En cuanto a la nueva identidad gráfica, el negro y amarillo que han caracterizado al partido durante años serán sustituidos por una nueva paleta que incluye beige, que simboliza las raíces, y naranja, que representa la ideología de izquierda, aunque el negro y el blanco seguirán en la mezcla, evocando institucionalidad y libertad, respectivamente.

El uso del naranja busca retomar un color que ha sido significativo en la historia de ERC, a pesar de que el amarillo, emblemático durante el 'Procés', no desaparecerá por completo: "Regresamos a un color que nos ha definido en el pasado y que sigue siendo parte de nuestra identidad", explicó Alamany.

El logotipo también experimentará un cambio, pasando a ser de color naranja. Aunque mantendrá la forma triangular que se inspira en las cuatro barras de la 'senyera', se suavizarán las esquinas y se ampliarán las barras. Además, el nombre 'Esquerra Republicana' se presentará en minúsculas, a diferencia de su antiguo formato en mayúsculas.

Esta renovación visual se implementará en todos los canales de ERC, incluyendo su sitio web, redes sociales y espacios físicos como la sede del partido. Los usuarios ya pueden apreciar este nuevo enfoque en plataformas como Instagram, TikTok y X.

El desarrollo de esta nueva identidad ha sido llevado a cabo bajo la dirección de la nueva cúpula del partido, en colaboración con una consultora externa, y fue oficialmente revelado durante la última Ejecutiva Nacional de ERC.