La candidata de la CUP, Laia Estrada, acusó a Pere Aragonès y Carles Puigdemont de "vender humo" en cuanto a la negociación de la autodeterminación en Cataluña. Esta crítica se dio en el contexto de un llamado a un cambio de rumbo por parte de ERC y Junts en temas sociales y nacionales, con la invitación a los Comuns a unirse después de las elecciones del 12 de mayo.

Estrada mencionó que durante la última legislatura, tanto ERC como Junts han privilegiado el diálogo con el PSC, el PSOE y Madrid en lugar de dialogar con la izquierda independentista, lo cual considera un obstáculo para el avance de Cataluña. Destacó la importancia del diálogo entre fuerzas independentistas y progresistas, destacando el papel crucial de la CUP en este proceso.

La candidata enfatizó que es necesario avanzar en temas sociales, como la vivienda, rechazando la actual ley estatal que considera ineficaz. También alertó sobre la posibilidad de que los Comuns se alíen con fuerzas contrarias a sus principios debido a la ruptura entre Podemos y Sumar.

En cuanto a posibles alianzas postelectorales, Estrada indicó que la CUP se guiará por un programa para combatir el empobrecimiento y la emergencia climática, sin establecer líneas rojas ni condiciones previas. Criticó la cercanía entre ERC, Junts y el PSC durante la última legislatura, y cuestionó si planean pactar con los socialistas en el futuro.

La candidata de la CUP acusó a ERC y Junts de engañar con propuestas de referéndum acordado y autodeterminación, argumentando que actualmente no es posible negociar un referéndum con el Estado español. Propuso explorar la desobediencia como vía para avanzar en el independentismo a través de la mediación internacional.

En términos electorales, Estrada manifestó la intención de la CUP de revalidar sus nueve escaños en el Parlament y buscar una mayor capacidad de incidencia. Relacionó la pérdida de apoyos en las últimas elecciones con la falta de avances en autodeterminación y el deterioro de los servicios públicos durante las últimas legislaturas.