Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular (PP), ha manifestado que la política fiscal vigente no favorece el bienestar de las clases medias y bajas en España. Durante su intervención en el 44 congreso confederal de la Unión General de Trabajadores (UGT), que se lleva a cabo en Barcelona hasta el miércoles, hizo un llamado a la colaboración para desbloquear la ley de conciliación que su partido ha presentado en el Congreso.

Este discurso fue realizado en la apertura del congreso, donde Pepe Álvarez busca su reelección como secretario general del sindicato. En el evento también estuvieron presentes figuras políticas relevantes como la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y varios ministros del gobierno, además del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y el conseller de Presidencia de la Generalitat, Albert Dalmau.

Feijóo enfatizó que su presencia en un congreso de UGT no representa un desafío, puesto que no concibe a España como un país dividido en facciones. Reconoció que actualmente no cuenta con la mayoría para dirigir el país, pero se comprometió a trabajar junto a UGT cuando esté en esa posición.

Este hecho es significativo, ya que representa la primera vez que un líder de la oposición del PP asiste a un congreso confederal de UGT. Feijóo subrayó que la mayoría de sus votantes son trabajadores y expresó su deseo de que los militantes del PP que son afiliados de UGT puedan persuadir a su sindicato acerca de las políticas laborales de su partido.

“Si no lo logran, y estoy convencido de que actualmente carecemos de la mayoría para hacerlo, tengan la certeza de que seguiré esforzándome por alcanzar un entendimiento con UGT”, declaró. Además, defendió la necesidad de establecer políticas de Estado que sirvan al pueblo y no a intereses particulares.

FORJAR LA RELACIÓN CON UGT

El líder del PP argumentó que uno de los motivos que lo llevaron a participar en el congreso de UGT es su respeto por la responsabilidad de los agentes sociales, y recordó que los gobiernos del PP han cosechado éxitos gracias al diálogo social. Mencionó acuerdos previos logrados con exministros como Javier Arenas, Manuel Pimentel y Fátima Báñez.

“Tengo la intención de mantener esta relación”, afirmó Feijóo, quien durante sus tres décadas en la gestión pública ha cultivado una conexión “intensa” con UGT, aunque ha calificado esta relación como a veces “compleja”, a pesar de considerarla enriquecedora.

Asimismo, Feijóo abogó por la aprobación de una ley de conciliación que extienda a 20 semanas los permisos de paternidad y maternidad, impulsando la creación de escuelas infantiles gratuitas en todo el país y proponiendo una mayor flexibilidad laboral para atender a los hijos. También planteó la idea de implementar un "banco de horas" para facilitar jornadas laborales flexibles.

En otro ámbito, Feijóo criticó la política fiscal vigente, asegurando que esta no contribuye al bienestar de las clases medias y bajas. Denunció que, a pesar de los altos índices de inflación, no se ha reducido el impuesto sobre la renta, resultando en que la renta real de los trabajadores ha crecido menos que la inflación.

El presidente del PP insistió en que en España deben ser las mayorías quienes retomen las decisiones importantes, señalando que "nuestra política ha estado demasiado tiempo en manos de minorías". Asimismo, advirtió sobre el triunfalismo económico, considerándolo un lujo erróneo.

CUESTIONES CRUCIALES: PARO Y PRECIARIEDAD

Además, Feijóo calificó de error "seguir hipotecando a las generaciones futuras", describiendo la actual combinación de paro, precariedad y altos precios como una "tormenta perfecta" que dificulta a los jóvenes acceder a la vivienda.

“La igualdad de todos los españoles y la redistribución de la riqueza deben prevalecer sobre cualquier otro interés”, argumentó, al tiempo que defendió el aumento de las pensiones y criticó al Gobierno por, según su opinión, no llevar a cabo políticas en el ámbito de la sanidad en los últimos cinco años.

Por último, Feijóo lamentó la falta de confianza en España, apuntando que solo se han aprobado tres Presupuestos Generales del Estado (PGE) en los últimos seis años y que la inversión extranjera ha caído a la mitad, de acuerdo con sus cifras.

Tras su discurso, Camil Ros, secretario general de UGT en Cataluña, agradeció a Feijóo sus palabras e instó al líder del PP a considerar votar a favor o abstenerse en futuras votaciones sobre la reducción de la jornada laboral, sugiriendo que esta medida podría ser beneficiosa.