La presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), Dolors Feliu, ha afirmado que el espionaje del Catalangate busca demonizar una ideología. Estas declaraciones se hicieron durante el debate "Catalangate: la persecución política" en la Universitat Catalana d'Estiu (UCE) en Prada de Conflent, Francia.
En el coloquio participaron Xavier Antich, presidente de Òmnium Cultural; Josep Costa, exvicepresidente del Parlament; y Josep M. Ganyet, ingeniero informático de la Universitat Pompeu Fabra.
Feliu mencionó que siempre ha existido la sensación de que los líderes soberanistas son espiados, recordando que el primer representante del movimiento independentista que fue espiado fue Jordi Sànchez en 2015.
Por su parte, el presidente de Òmnium Cultural, Xavier Antich, declaró que el espionaje del Catalangate es solo una pequeña parte de la persecución política del independentismo y mencionó que Amnistía Internacional ha denunciado este caso de espionaje. Acusó al Estado español de utilizar herramientas no autorizadas para perseguir a los representantes del independentismo.
Tanto Antich como Feliu afirmaron que volverán a las calles en la Diada de Catalunya del 11 de septiembre para pedir la independencia y que todos los independentistas serán bienvenidos.
Josep Costa, exvicepresidente del Parlament, inició su intervención ironizando sobre los espías que los estaban escuchando y mencionó que no le han informado si ha dejado de ser espiado. Acusó a España de no cumplir acuerdos y de mantenerse en guerra mientras el liderazgo independentista estaba en negociaciones de paz.
Finalmente, el ingeniero informático Josep M. Ganyet proporcionó explicaciones técnicas sobre el software Pegasus, utilizado para espiar a los 65 independentistas.