Crónica Cataluña.

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Gimnasios de Barcelona proponen restricciones de 3 minutos en el uso de duchas por la situación de sequía.

Gimnasios de Barcelona proponen restricciones de 3 minutos en el uso de duchas por la situación de sequía.

La Associació Catalana d'Entitats de gestió d'instal·lacions esportives públiques, Gestiona, ha lanzado la campaña 'Cada gota d'aigua resta!' en 44 centros deportivos de Barcelona para reducir el consumo de agua en un 25% a partir de la semana que viene. Esta medida forma parte de un conjunto de medidas que buscan un uso más eficiente de las duchas.

La campaña incluye la instalación de "dosificadores" en los centros deportivos que permiten ahorrar hasta 9 litros de agua por minuto. Además, se distribuirán aproximadamente 1.000 dosificadores a los usuarios para que también puedan utilizarlos en sus hogares.

Otra acción que se llevará a cabo es la renovación del agua de las piscinas con agua regenerada, así como la reducción del tiempo de los pulsadores de las duchas a unos 15 segundos para fomentar duchas más rápidas. Según las estimaciones, estas medidas podrían reducir el consumo de agua en un 25%.

Estas medidas afectarán a unos 185.000 usuarios de los centros deportivos de Barcelona. Sin embargo, la intención de Gestiona es extender estas medidas a todos los centros deportivos públicos de Catalunya.

Este jueves se presentarán las medidas de la campaña en una reunión con el conseller de Acción Climática de la Generalitat, David Mascort. En la misma jornada, la Comisión Interdepartamental de la Sequía evaluará la declaración del estado de emergencia en el sistema Ter-Llobregat.

Respecto a la medida de cerrar duchas en las instalaciones deportivas debido a la emergencia por sequía, el presidente de Gestiona considera que es una "improvisación mediática o chiste" que no contribuirá al ahorro de agua, ya que las duchas en los hogares suelen ser más largas y utilizan un caudal de agua mayor.

Por último, Viladot ha señalado que las restricciones debido a la declaración del estado de emergencia por sequía podrían implicar una pérdida del 20% de los usuarios en los centros deportivos catalanes, ya que "si la gente no puede ducharse, habrá bajas".