El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha destacado la necesidad de que la inflación regrese a niveles consistentes con el objetivo a medio plazo del 2%. Estas declaraciones las hizo durante una conferencia sobre los efectos de la inflación y la redistribución de la riqueza en los hogares en la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.

En sus palabras, ha afirmado que la estabilidad de los precios es la mejor contribución que la política monetaria puede hacer para respaldar el crecimiento sostenible de la economía, el empleo y la reducción de la desigualdad.

Hernández de Cos ha explicado que el impacto de la inflación en la riqueza real de los hogares es heterogéneo, dependiendo de las fuentes de ingresos y las diferencias en el gasto. Según los datos presentados por el Banco de España, las canastas de consumo varían según los hogares y están estrechamente relacionadas con los ingresos y la edad.

El gobernador señaló que a medida que la inflación se vuelve más persistente, los hogares comenzarán a ajustar sus inversiones y gastos, alejándose de activos cuyo valor se fija en términos nominales y de bienes o servicios cuyos precios aumentan por encima del promedio.

También hizo hincapié en que las negociaciones salariales incorporarán gradualmente la compensación por el aumento de los precios, mientras que algunas fuentes de ingresos, como las pensiones, serán compensadas solo después de los aumentos de precios.

Por último, Hernández de Cos destacó que las medidas fiscales discrecionales pueden compensar los efectos heterogéneos en los hogares si se dirigen a los agentes más afectados, y para ello es necesario combinar información sobre ingresos, riqueza y gasto de los hogares.