En una declaración realizada el martes, la diputada de la CUP en el Parlament, Pilar Castillejo, ha manifestado la intención de su grupo de solicitar a la Mesa de la Cámara catalana la reinstauración de la Comisión de investigación sobre las infiltraciones policiales. Este movimiento, según Castillejo, busca "recuperar el trabajo" que no pudo completarse en la legislatura anterior.

La diputada explicó que, a pesar de que la anterior legislatura concluyó y la comisión quedó sin terminar sus objetivos, están trabajando para congregar el mismo apoyo que tuvieron en la etapa anterior. Castillejo destacó que la intención es poner en marcha esta comisión junto a los partidos ERC, Comuns y Junts, durante una rueda de prensa celebrada en el Parlament.

Este anuncio se produce a raíz de la divulgación este domingo de un documental por parte de 3Cat, que expone las investigaciones de 'La Directa' sobre las infiltraciones de agentes de la Policía Nacional en movimientos sociales situados en Valencia, Barcelona y Girona.

Castillejo también ha instado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a asistir al Parlament para ofrecer explicaciones sobre estas infiltraciones, coincidiendo en esta demanda con los Comuns. “Es necesario que den la cara y aclaren qué es lo que buscaban en nuestros movimientos sociales y políticos”, subrayó la parlamentaria.

Asimismo, la diputada ha exigido claridad sobre lo que sabía el Govern de la Generalitat y los Mossos d'Esquadra respecto a estas acciones. “Queremos garantías de que esto no se repetirá. No se pueden tolerar hechos de esta naturaleza”, agregó con firmeza.

En su intervención, Castillejo expresó su apoyo a un comunicado emitido por diversas entidades y colectivos afectados, en el que se califica de “constitutivas de delito de tortura” las operaciones de infiltración. La diputada defendió que tales acciones denotan una intención del Estado de controlar y perseguir la disidencia política.

Por otro lado, en relación al inicio del proceso para el traspaso de la R1 de Rodalies, Castillejo se mostró favorable a la transferencia de la red ferroviaria, aunque manifestó su preocupación de que esta medida podría “aumentar la complejidad de este desbarajuste” del servicio, poniendo en duda que sea una solución efectiva.

Finalmente, puntualizó que el traspaso debería incluir la totalidad de la red y criticó que no se están realizando avances significativos en otros aspectos relacionados con Rodalies, planteando serias inquietudes sobre el futuro del servicio ferroviario en Cataluña.