La Conselleria de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat ha acordado con la familia del militante antifranquista Cipriano Martos que la entrega de sus restos se hará en Huétor, una localidad de Granada de la que es oriunda la familia.
El departamento ha emitido un comunicado este sábado en el que se especifica que la familia y su entorno podrán decidir cómo será el acto para hacer efectiva la vigencia plena y prioritaria de los derechos a la verdad, la justicia y la reparación, y de las garantías de no repetición.
Las autoridades de la Generalitat comenzaron los trabajos para recuperar los restos del difunto en diciembre en la fosa común del cementerio de Reus en Tarragona, de la que se exhumaron un total de 41 cuerpos. De entre ellos, uno resultó ser compatible con el de Martos.
Tras tomar muestras genéticas y realizar pruebas de ADN, las autoridades confirmaron el 22 de febrero que los restos correspondían en efecto a Cipriano Martos.
Martos, obrero y sindicalista de Granada, emigró a Morón de la Frontera en Sevilla y, posteriormente, a Teruel, Sabadell, Terrassa y Reus. Durante su vida, trabajó como jornalero, minero, empleado del textil y albañil. Estaba afiliado a Oposición Sindical Obrera (OSO) y militó en el Partido Comunista Español Marxista-Leninista y en el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (Frap).
La Guardia Civil lo detuvo el 25 de agosto de 1973 tras una acción de propaganda política en Igualada en Barcelona y lo llevaron al cuartel de Reus acusado de propaganda ilegal y de pertenecer al Frap.
Según los informes policiales, Martos fue interrogado y torturado y, dos días después, el 27 de agosto, fue trasladado al hospital por haber ingerido un líquido corrosivo conocido como "líquido de la verdad", una combinación de ácido sulfúrico y gasolina, y el 17 de septiembre murió por una hemorragia interna.