El Gobierno catalán ha aprobado un plan para ayudar a las familias con niños en educación primaria a adquirir material escolar. La iniciativa consistirá en vales de 100 euros que se distribuirán por correo postal a lo largo del verano para ser canjeados por libros, diccionarios, papelería, calculadoras, mochilas y juegos educativos. La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha explicado que el objetivo de la medida es “paliar el incremento de precios” y contribuir a “crear un escudo económico y social que ayude a atenuar el impacto” que sufren las familias por el costo de la vida.

La iniciativa beneficiará a medio millón de alumnos y se financiará con un presupuesto de 50 millones de euros. El plazo para canjear los vales finalizará el 30 de noviembre de este año y los establecimientos comerciales que deseen participar en la campaña deberán adherirse a una plataforma para demostrar que cumplen los requisitos necesarios para beneficiarse de la ayuda. Además, deberán presentar una declaración responsable comprometiéndose a cambiar los vales por el material escolar designado.

El diseño y la implementación del plan serán responsabilidad de tres departamentos: Economía y Hacienda, Educación y Presidencia. La gestión de las ayudas, incluyendo la impresión y distribución de los vales, así como la supervisión del procedimiento de adhesión de los establecimientos comerciales y la verificación de la validez de los vales, corresponderán al departamento de Economía y Hacienda. El departamento de Educación se encargará de gestionar el censo de los beneficiarios, actualizar la base de datos del alumnado, diseñar los vales y difundir información sobre la iniciativa. Finalmente, el departamento de Presidencia se ocupará de las campañas de difusión para alcanzar el público objetivo y explicar la mecánica de concesión de las ayudas.