Un total de 285.000 vehículos han abandonado Barcelona y sus alrededores hasta las 19:00 horas de este jueves, una cifra que representa solo el 50% de lo que se estimaba inicialmente para la operación salida de la Semana Santa.

Ramon Lamiel, director del Servei Català de Trànsit (SCT), señaló que las retenciones en las carreteras han disminuido un 35% en comparación con otros años durante este periodo, lo que resulta significativo para los conductores que intentan escapar de la ciudad hacia destinos turísticos.

En una entrevista emitida por el canal 3/24 y recogida por Europa Press, Lamiel destacó que uno de los principales objetivos de las autoridades era reducir las congestiones que suelen comenzar a notarse a partir de las 10 de la mañana en Jueves Santo y que suelen continuar durante el día siguiente. Él se mostró satisfecho con los resultados alcanzados.

El director del SCT atribuyó esta mejora en el tráfico a la implementación de carriles adicionales en dos secciones de la AP-7. Uno de los nuevos carriles se ubica en el tramo que va de Martorell a Santa Oliva en dirección norte, mientras que el otro se extiende entre Montornès y Sils, en dirección sur.

A medida que avanzaba la tarde, Lamiel compartió que la salida de vehículos había alcanzado una media de entre 7.000 automóviles cada 15 minutos, lo que se traduce en unas 28.000 a 30.000 salidas por hora. Estas cifras sugieren que el sistema viario local ha podido gestionar el flujo de tráfico de manera efectiva, evitando así el colapso de las principales vías.