Este lunes, la ciudad de Badalona (Barcelona) fue escenario de dos manifestaciones en polarización, una en apoyo a los desalojados del antiguo instituto B9 y otra en rechazo a su llegada al municipio. Ambas concentraciones se llevaron a cabo frente al antiguo albergue municipal de Can Bofí Vell, donde los ciudadanos expresaron sus posturas encontradas.

Los Mossos d'Esquadra fueron desplegados para establecer un cordón que mantuviera a los dos grupos separados, mientras que los manifestantes pro y contra los desalojados intercambiaban consignas, reflejando la división que el tema ha generado en la comunidad.

Los que apoyan a los desalojados, organizados por colectivos que defienden el derecho a la vivienda, corearon frases como "Albiol fascista" en referencia al alcalde Xavier García Albiol, además de proclamar que "Nadie es ilegal", en un intento claro por defender la situación de aquellos que han sido desalojados.

Esta movilización surge en respuesta a una manifestación previa realizada el domingo por la noche, donde un grupo de residentes se congregó ante la parroquia Mare de Déu de Montserrat. Este encuentro comunitario impidió que una quincena de desalojados del B9 recibieran alojamiento, un acuerdo previamente pactado por diversas organizaciones sociales.

Algunos de los vecinos han expresado su preocupación por la llegada de los desalojados, argumentando que podría traer consigo problemas de inseguridad al barrio de Sant Crist, área en la que se encuentra la parroquia y donde se desarrolló la manifestación del domingo.