Este viernes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encuentra en La Moncloa para mantener un encuentro urgente con Salvador Illa, presidente de la Generalitat de Cataluña y líder del PSC. Esta reunión privada se produce en medio de una creciente crisis provocada por acusaciones de corrupción que involucran a Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE.

De acuerdo con informaciones de Europa Press, el encuentro no figura en la agenda oficial de Sánchez, lo que ha generado especulaciones sobre su importancia. La situación se ha intensificado, especialmente tras la imputación de Cerdán por parte del Tribunal Supremo y la reciente intervención de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en la sede nacional del PSOE en la calle Ferraz, donde se han llevado a cabo acciones para clonar el correo electrónico del exdirigente socialista.

El último acto público de Sánchez tuvo lugar el miércoles en el Congreso, donde respondió a las preguntas de los diputados en plena sesión de control al Gobierno. En esa ocasión, se ventiló un reciente informe de la UCO que vincula a Cerdán con el cobro de comisiones ilegales en contratos de obra pública.

En la jornada del jueves, el presidente mantuvo su agenda vacía, pero trabajó en un documento dirigido al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en el que se manifestaba en contra del aumento del gasto en Defensa al 5% del PIB. Este viernes, también se ha programado un día sin actos públicos para Sánchez, según mencionan fuentes cercanas al Gobierno.

Por su parte, Salvador Illa se vio obligado a cancelar un evento que había programado en el Colegio de Economistas de Barcelona para poder asistir a la cita en La Moncloa. Se espera que en su reunión ambos líderes aborden la crisis que afecta al PSOE, que también toca a Navarra, donde el ‘número dos’ del partido, Ramón Alzórriz, ha renunciado tras revelarse su conexión con una empresa que presuntamente estuvo involucrada en actividades corruptas.

Un tema adicional que podría ser discutido en este encuentro es la financiación especial de Cataluña. Illa ha manifestado su confianza en que se logrará un acuerdo con el Gobierno antes de que concluyan los plazos establecidos con ERC, que se cumplen a finales de junio. Este acuerdo tiene como objetivo un desarrollo progresivo de la hacienda catalana, comenzando por la gestión del IRPF en 2026, algo que Illa ha reiterado que se cumplirá en tiempo y forma.