BARCELONA, 14 de abril. En una operación que evidencia el compromiso de las fuerzas del orden en la lucha contra el narcotráfico, la Policía Nacional ha desmantelado una red de tráfico de drogas, confiscando 378 kilos de cocaína en varias instalaciones ubicadas en la Zona Franca de Barcelona y en una nave industrial en El Prat de Llobregat. La droga tenía como destino final las ciudades australianas de Sidney y Melbourne, donde se enviaba encubierta entre suministros médicos.

La investigación, llevada a cabo por la Brigada Provincial de Policía Judicial de Barcelona, se inició a comienzos de 2024 al detectarse una organización criminal operando en la capital catalana. Esta organización utilizaba una empresa de transporte local para facilitar el envío de cocaína hacia el continente australiano, destacando su capacidad para evadir las medidas de control.

Los miembros de esta banda realizaban envíos aéreos urgentes, prestando especial atención a la planificación de las rutas y seleccionando cuidadosamente los momentos más propicios para las escalas, que les permitían actuar con mayor discreción. Asimismo, se aprovecharon de la infraestructura de una empresa dedicada a la compra de productos sanitarios, lo que les brindaba una cobertura sólida para sus actividades ilegales.

Dentro de las instalaciones de El Prat, los traficantes llevaban a cabo la manipulación de la droga de manera ingeniosa, sustituyendo parte del material sanitario por cocaína, que luego ocultaban entre guantes de látex y sábanas quirúrgicas. Este método de ocultamiento pone de manifiesto la audacia y el nivel de sofisticación que estos delincuentes alcanzaron en su operativa.

El avance en la investigación culminó el 10 de febrero con dos registros en la nave ubicada en El Prat, donde los agentes arrestaron a uno de los implicados. En su domicilio en Cornellà de Llobregat, encontraron los 378 kilos de cocaína, cuyo valor en el mercado negro australiano supera los 250.000 euros por kilo, marcando un incremento impresionante del 1.000% en comparación con su costo en España.

El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción 3 de El Prat, que ha decidido que debe permanecer en prisión provisional mientras continúa la investigación. Las autoridades nacionales colaboran con sus homólogos australianos en un esfuerzo por desmantelar por completo esta red criminal y llevar ante la justicia a todos sus miembros.