En una reciente declaración, la consellera de Derechos Sociales de la Generalitat, Mònica Martínez Bravo, se pronunció sobre la reciente delegación de competencias en materia de inmigración al Govern, que se realizó como parte del pacto entre PSOE y Junts. Según Martínez Bravo, este movimiento representa un avance significativo en el autogobierno y se enmarca dentro de lo que establece la Constitución española.

La consellera compartió sus comentarios con la prensa tras participar en la Conferencia Sectorial de la Inmigración en Madrid. Aseguró que el tema de la inmigración fue abordado en la reunión a solicitud de algunas comunidades autónomas del Partido Popular, aunque originalmente no figuraba en la agenda del encuentro.

Martínez Bravo expresó su entusiasmo ante esta nueva delegación de competencias, viéndola como una oportunidad valiosa para acercar la política migratoria a las administraciones locales, que son las más cercanas a la ciudadanía. Además, destacó la posibilidad de crear sinergias con la política de servicios sociales, cuya gestión ya ha sido transferida a las comunidades autónomas.

La consellera se mostró abierta a la idea de llevar a cabo una conferencia específica sobre esta materia, argumentando que, a través de la transparencia y el diálogo con otras comunidades autónomas, se puede demostrar la coherencia de esta medida dentro del marco del autogobierno.

Martínez Bravo concluyó afirmando que, si surge la necesidad de más reuniones, no habría inconveniente alguno. Resaltó la importancia de la transparencia y la comunicación para contrarrestar la información parcial o inexacta que ha rodeado al acuerdo, subrayando la necesidad de hacer pedagogía sobre los beneficios de esta delegación.