Barcelona, 21 de diciembre.

Este domingo, la Protecció Civil de la Generalitat ha decidido desactivar la alerta del Plan especial de emergencias por inundaciones en Catalunya (Inuncat), tras varias horas de lluvias intensas que han impactado en distintas regiones de la comunidad, según un comunicado emitido.

A pesar de la desactivación de la alerta, el plan se mantiene en fase de prealerta, dado que se esperan nuevas precipitaciones significativas, especialmente en las áreas del litoral y prelitoral Central y de Girona, tanto durante la tarde como en la noche de este domingo y hasta la mañana del lunes.

De acuerdo con el Servei Meteorològic de Catalunya (SMC), el episodio de lluvias intensas ha llegado a su fin, aunque un nuevo frente climatológico se aproxima y podría generar precipitaciones en el litoral y prelitoral central, así como en el noreste de Catalunya, con un incremento en la probabilidad de lluvias en el Alt Empordà.

Las precipitaciones continuarán en la madrugada del próximo lunes, concentrándose en la parte noreste del territorio nacional.

Entre las muestras más destacadas de acumulación de lluvia hasta ahora, se encuentran Sils con 98,3 l/m2; Fogars de la Selva con 89,8 l/m2; Badalona con 76,8 l/m2; Salt con 75,5 l/m2; y Mataró con 70,6 l/m2.

El servicio de emergencias 112 ha recibido un total de 261 llamadas relacionadas con este fenómeno meteorológico, la gran mayoría de ellas concentradas en la provincia de Barcelona, con un total de 230 llamadas, un 90,55% del total.

Entre las comarcas que han reportado más llamadas se destacan el Barcelonès, con 104 (40,15%); el Maresme con 66 (25,48%); el Vallès Oriental con 35 (13,51%); y el Vallès Occidental con 19 llamadas (7,34%).

Los Bombers de la Generalitat han atendido alrededor de 120 avisos desde la noche del viernes hasta las 10:00 horas de este domingo, concentrándose la mayoría de estas emergencias en la Región de Emergencias Metropolitana Nord y en la Región de Emergencias de Girona.

La principal causa de intervención fue la gestión de inundaciones en locales y garajes, el acumulamiento de agua en la vía pública, individuos atrapados en vehículos, así como la remoción de árboles caídos y desprendimientos de piedras en las carreteras.

La Agència Catalana de l'Agua (ACA) ha informado que los caudales de los ríos están en descenso, salvo en el tramo final del Ter, donde, a pesar de estar por debajo de los niveles de alerta, sigue aumentando gracias a las contribuciones del río Onyar.

La ACA continuará monitorizando la situación, ya que anticipa la posibilidad de crecidas con las nuevas lluvias esperadas durante la noche, especialmente en las comarcas del noreste donde se prevé la mayor concentración de lluvias.

Desde Protecció Civil se hace un llamado a la prudencia, recomendando evitar desplazamientos en caso de lluvias intensas y no cruzar ríos, rieras o barrancos debido a la fuerza que puede arrastrar a personas y vehículos. Se sugiere comprobar las condiciones de las carreteras y utilizar preferentemente las vías principales, así como estar atentos a las previsiones meteorológicas.