El Ministerio Público ha solicitado una pena de 19 años de prisión para un británico acusado de asesinar a un hombre durante una fiesta de sexo y drogas en una masía de Vallgorguina, en las cercanías de Barcelona, en el año 2023. Esta información fue revelada por Europa Press en su reciente informe sobre el caso.

De acuerdo con los documentos de la acusación, el imputado viajó a Barcelona en febrero de 2023 con la intención de reunirse con la víctima, con quien había acordado mantener relaciones sexuales a cambio de un pago.

Los encuentros acontecieron en un ambiente caracterizado por el consumo de diversas sustancias psicoactivas, lo que se conoce como 'chemsex'. Este tipo de prácticas implica el uso de drogas con el objetivo de potenciar la actividad sexual, dando lugar a maratones de sexo que pueden durar horas e incluso días, según detalla la Fiscalía en su informe.

Una vez dentro de la vivienda de la víctima, ambos comenzaron a consumir voluntariamente varias drogas, que incluían cocaína, GHB, metanfetamina, anfetamina y MDMA, con la finalidad de alcanzar un estado de excitación elevado. También montaron un colchón en el salón para facilitar sus encuentros íntimos, que se extendieron hasta la madrugada del día siguiente.

En un giro trágico de los acontecimientos, el acusado se dirigió a la cocina, tomó un cuchillo y apuñaló repetidamente a la víctima en el pecho y la espalda. La víctima, a pesar de las heridas, logró escapar saltando desde una altura aproximada de tres metros, pero sucumbió a las lesiones poco después, lo que le costó la vida.

La Fiscalía argumenta que el hombre asesinado se encontraba en una situación de vulnerabilidad, desprevenido y confiado en el contexto íntimo que compartía con su agresor, lo que le impidió defenderse eficazmente de la agresión.

El informe también indica que, debido a la ingesta de sustancias, el acusado presentó una intoxicación aguda que, aunque no afectó significativamente a sus capacidades cognitivas, sí trastornó moderadamente su voluntad en el momento del crimen.

La víctima tenía 38 años al momento de su fallecimiento y era padre de una niña pequeña, con la que mantenía una relación muy cercana a pesar de no convivir habitualmente. Este trágico suceso ha causado un profundo dolor a la niña y a su madre.

La Fiscalía no solo reclama la condena de 19 años por asesinato con alevosía, sino que también exige una medida de cinco años de libertad vigilada, durante los cuales el acusado deberá someterse a un programa de rehabilitación por drogas y a un curso de educación sexual vinculado al consumo de estupefacientes.

Por último, se ha solicitado que el acusado indemnice a los padres, la hermana y la hija de la víctima por los daños emocionales y materiales causados. El juicio se llevará a cabo en la Audiencia de Barcelona, aunque aún no se ha fijado una fecha específica.